En el marco del conflicto salarial entre los trabajadores aceiteros y la industria, hoy se llevó a cabo una nueva reunión entre las partes, para intentar destrabar el conflicto salarial. La disputa paritaria comenzó en los primeros días de octubre y ante la falta de acuerdo, la Secretaría de Trabajo dictó la conciliación obligatoria, que se extenderá hasta el 5 de noviembre.
Los gremios que representan al sector - Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina (FTCIODyARA) y el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA) San Lorenzo reclaman un salario mínimo de $2.344.728.
En la segunda audiencia que se llevó a cabo, no se logró arribar a un acuerdo. Tras el encuentro, la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) informó que no se “lograron avances ni arribar a acuerdos salariales, a pesar del enorme esfuerzo de la industria en promover actualizaciones salariales siguiendo el índice de inflación mensual del INDEC”.
Desde la entidad presidida por Gustavo Idígoras reconocieron que “estamos a la espera de la próxima convocatoria a audiencia y exhortamos a las partes sindicales a traer propuestas concretas siguiendo los parámetros de inflación, que siempre han sido la forma de arribar a acuerdos salariales”.
Por el lado de la Federación Aceitera, liderada por Daniel Yofra, reconocieron a este medio que “no hay novedades, no hubo avances en la negociación y está todo trabado”.
Marco Pozzi, Secretario General del Sindicato de Aceiteros Rosario (SOEAR) y Secretario de Salud Laboral de la Federación Aceitera hizo un diagnóstico de la situación actual, sin ahorrar críticas para los industriales.
“Estas patronales que hace 20 días hicieron un acuerdo con el Gobierno nacional, hicieron una media semana de tipo CyberMonday y liquidaron 7.000 millones de dólares con retenciones cero, que les generó una ganancia de 1.500 millones de dólares. Salarialmente, para nosotros nos representa diez años de aumentos, eso ganaron en tres días.
El gremialista remarcó que “esas mismas empresas nos dicen que nosotros no podemos ganar un salario que nos permita vivir dignamente. En relación a todo eso, nosotros solo tenemos una salida, que es la huelga”.
Pozzi adelantó que si “para el 5 de noviembre no tenemos un acuerdo que sea favorable para los trabajadores, que ronde los $2.344.000 de salario mínimo para la categoría inicial, seguramente estaremos de huelga”.