Había ido a su casa de Mar del Plata porque él la había invitado, con la promesa de “pasar un rato” y consumir drogas. Pero apenas cruzó la puerta, todo se transformó en una escena de terror. La joven, de 25 años, fue golpeada con brutalidad por el dueño de la vivienda y una mujer conocida como “Sasha”, que la sujetó del cuello mientras el hombre le apuntaba con un revólver calibre .38. Los golpes la dejaron inconsciente.
Cuando recuperó el conocimiento, logró escapar a los gritos hacia una vivienda vecina. Desde allí, pidió auxilio y fue trasladada primero al CAPS de Playa Serena y luego al Hospital Interzonal General de Agudos, donde recibió curaciones por las lesiones. Desde entonces, permanece alojada en la Casa de la Mujer del barrio, con acompañamiento psicológico y asistencia por adicciones.
El ataque ocurrió el 1 de octubre en una vivienda de la calle 433 bis al 1200, en el barrio Playa Serena. Según la denuncia, la agresión se desencadenó sin previo aviso y con una violencia inusitada. “Me pegaba con el arma en la cabeza y en el cuerpo, hasta que me desmayé”, declaró la víctima.
El 24 de octubre, tres semanas después, efectivos del Gabinete Técnico Operativo de la Comisaría 13ª irrumpieron en el domicilio del acusado por orden de la UFI N° 4 y el Juzgado de Familia N° 5, a cargo de la jueza Obligado. Durante el allanamiento, secuestraron un revólver calibre .38 y cinco municiones calibre .32, que fueron enviadas a Policía Científica para peritajes.
El fiscal interviniente avaló el procedimiento y ordenó la notificación del imputado, quien quedó en libertad bajo el artículo 161 del Código Procesal Penal Bonaerense, pero con restricción de acercamiento a la víctima.
Fuentes policiales informaron que el hombre cuenta con antecedentes por portación de arma, tentativa de robo, robos reiterados y amenazas. Ahora enfrenta una nueva causa por lesiones graves y violencia familiar, en una investigación que continúa abierta.