Aunque no hubo declaraciones oficiales sobre el motivo, el distanciamiento se suma a una serie de episodios recientes que evidencian la fractura interna en el Gobierno. Villarruel no participó de los festejos del domingo por la noche tras las elecciones legislativas, a diferencia de lo ocurrido en 2023, cuando acompañó a Milei en la celebración de la victoria presidencial.
El clima de enfrentamiento se intensificó en los últimos días, luego de que el publicista oficialista Santiago Oría acusara a Villarruel de haber pedido el cierre de la escuela donde votó para hacerlo “ella sola”. Desde el entorno de la vicepresidenta desmintieron la versión y aseguraron que su ingreso en vehículo fue “por razones de seguridad”, y que luego votó con normalidad junto a otros ciudadanos.
Mientras tanto, Milei continúa concentrado en su agenda de reformas y en la reunión con gobernadores prevista para esta semana, pero el gesto digital con su vice no pasó inadvertido.
El enfriamiento del vínculo entre el Presidente y Villarruel -que comenzó meses atrás con diferencias políticas y de gestión- parece ahora haber llegado a un punto sin retorno, con repercusiones que podrían sentirse dentro de La Libertad Avanza y en el equilibrio institucional del oficialismo.
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