En apenas 62 minutos, Jannik Sinner desmanteló a Alexander Zverev con un 6-0 y 6-1 que quedará en la memoria del Masters 1000 de París. El italiano, número 2 del mundo, no solo se metió en la final con una actuación demoledora, sino que quedó a un paso de recuperar el liderazgo del ranking ATP, en una temporada que ya lo vio campeón en Australia, Wimbledon, Pekín y Viena.
El partido fue una exhibición de precisión, potencia y lectura táctica. Sinner ganó el 90% de los puntos con su primer saque, no enfrentó ni una sola chance de quiebre y le arrebató el servicio a Zverev en seis ocasiones. El alemán, defensor del título, apenas pudo sumar seis tiros ganadores y cometió 20 errores no forzados, frente a los 23 winners y 12 errores de su rival.
Más allá de los números, el desarrollo fue aún más elocuente. Sinner impuso su ritmo desde el primer game, con una intensidad que desbordó a Zverev en todos los sectores de la cancha. El alemán, que venía de una semana exigente, lució sin respuestas físicas ni estratégicas ante un rival que parece haber alcanzado una versión casi inhumana bajo techo y una confianza que no se negocia.
Con este triunfo, el italiano estiró su ventaja en el historial ante Zverev a 5-4, tras haberlo vencido también en la final de Viena la semana pasada. Como si fuera poco, registra ahora 25 victorias consecutivas en pista dura cubierta desde que abrió su camino al título con su país en las Finales de la Copa Davis en 2023.
El canadiense Félix Auger-Aliassime volvió a confirmar su gran temporada y superó a Alexander Bublik por 7-6 (3) y 6-4. Será la primera final con Sinner en París, con quien tiene un envidiable historial de 2-2, siendo uno de los pocos tenistas que mantiene un resultado positivo ante la máquina de San Candido.
La definición del Masters 1000 de París se jugará este domingo 2 de noviembre y podrá verse en vivo por Star+ y ESPN en América Latina. Si Sinner levanta el trofeo, desplazará a Carlos Alcaraz del primer puesto del ranking y confirmará lo que muchos ya sospechan: que su tenis, hoy, parece programado por una inteligencia artificial.
