El canciller Pablo Quirno recibió al flamante embajador de los Estados Unidos, Peter Lamelas, en un encuentro que marca un nuevo capítulo en la relación bilateral. La reunión, celebrada en el Palacio San Martín, tuvo como eje la reactivación del acuerdo comercial entre Argentina y Estados Unidos, un proyecto que promete beneficios concretos para la producción nacional y la inserción del país en los grandes mercados globales.
El encuentro se dio en un contexto de máxima sintonía política entre los gobiernos de Javier Milei y Donald Trump, lo que facilita una agenda conjunta en materia de inversiones, energía y cooperación tecnológica. Quirno destacó que el objetivo es bajar aranceles y abrir el acceso de más de 50 productos argentinos al mercado estadounidense, una medida que generaría divisas, empleo y previsibilidad para el sector exportador.
La designación de Quirno al frente de la Cancillería marcó un giro decidido hacia una política exterior pragmática y orientada al comercio. Su perfil técnico, con experiencia en finanzas internacionales, lo posiciona como el interlocutor ideal para acelerar negociaciones y traducir los acuerdos políticos en resultados económicos. Con Lamelas, Washington envía también una señal de confianza hacia Buenos Aires y una invitación a profundizar los lazos bilaterales.
Fuentes diplomáticas confirmaron que el entendimiento incluiría reducción de aranceles agrícolas, cooperación en litio y transferencia de tecnología energética, sectores en los que Estados Unidos ve un socio estratégico. La cancillería argentina sostiene que esta alianza puede duplicar el flujo de exportaciones en los próximos tres años si se mantiene la estabilidad macroeconómica.
El acuerdo comercial no solo apunta a la apertura de mercados, sino también al fortalecimiento del tejido productivo interno. La previsibilidad cambiaria y la mejora en los precios de exportación permitirían una reactivación del agro, la vitivinicultura, la industria alimentaria y la economía del conocimiento, sectores con alto potencial exportador. Según estimaciones oficiales, el impacto positivo podría alcanzar más de 2.000 millones de dólares anuales en nuevas ventas externas.
Este tipo de acuerdos favorece la integración argentina en cadenas globales de valor, un paso necesario para dejar atrás décadas de aislamiento comercial. Además, el fortalecimiento del vínculo con Washington amplía la capacidad de negociación con organismos multilaterales y potencia la llegada de inversiones a largo plazo.
El embajador Peter Lamelas presentó hoy copias de sus cartas credenciales al ministro de Relaciones Exteriores Pablo Quirno, iniciando así su misión como representante del presidente Trump en la Argentina. pic.twitter.com/OvVaaiNaMA
— Embajada de EEUU en Argentina (@EmbajadaEEUUarg) November 3, 2025
El gesto de Quirno simboliza la apuesta del gobierno por una diplomacia de resultados, basada en la apertura, la previsibilidad y la confianza internacional. En un escenario global competitivo, Argentina busca posicionarse como un socio confiable, que exporta calidad y estabilidad institucional. La recepción al embajador Lamelas marca, con probabilidad alta (85%), el inicio de una etapa de expansión comercial sin precedentes.
La estrategia de integración con Estados Unidos representa una oportunidad histórica para diversificar la matriz exportadora, reducir el déficit externo y fortalecer la soberanía económica desde la competitividad. En palabras del propio canciller, “abrirnos al mundo no es un riesgo: es la única manera de crecer de manera sostenida”.