Racing Club vive días de contrastes. Mientras el presidente Diego Milito oficializó ayer la renovación de contrato de Gustavo Costas como entrenador hasta fines de 2026, el club recibió el mismo día una dura sanción por parte de APREVIDE: el Cilindro de Avellaneda estará clausurado por tres fechas, lo que obligará al equipo a jugar sin público o buscar una sede alternativa.
La decisión del presidente académico llegó tras una reunión privada con el entrenador, en la que se valoró el respaldo del plantel, la cohesión interna y el impacto emocional que Costas generó en la hinchada. Pese a la reciente eliminación en semifinales de la Copa Libertadores, Milito apostó por la continuidad del proyecto.
“Defraudé a mi gente”, había dicho Costas tras caer ante Flamengo, pero el club eligió sostenerlo, convencido de que su liderazgo representa una identidad racinguista profunda.

La renovación de Costas tendrá respaldo para planificar el 2026, pero esta vez -a diferencia del mercado anterior- la presión de los hinchas por refuerzos de jerarquía se hace más urgente debido a la falta de peso ofensivo tras la salida de Maximiliano Salas, Roger Martínez y Juan Fernando Quintero. Milito, al ganar las elecciones, prometió un "salto de calidad" que no se reflejó en la cancha. Las compras que se hicieron (Vergara, Balboa) más la promoción de Conechny no pudieron reemplazar ese tridente que tanto éxito le había dejado a Racing en los torneos anteriores.
Sin embargo, más allá de la cuestión técnica de los futbolistas, una de las razones para la renovación fue el vínculo emocional que generó Gustavo Costas, tanto con el público como con el plantel.
“Estoy contento con el equipo y con el entrenador. Le ofrecimos a Gustavo (Costas) y al cuerpo técnico continuar por un año más. Hay que valorar llegar a semifinales de América tras 28 años, pero no nos conformamos: Racing debe jugar la Copa en 2026”, expresó Milito, reforzando que lo considera un pilar institucional y deportivo, más allá de los resultados inmediatos.
"Estoy contento con el equipo y con el entrenador. LE OFRECIMOS a Gustavo (Costas) y CT continuar por un año más.
— Juan Pablo De Luca (@juampideluca_) November 3, 2025
Hay que valorar llegar a semifinales de América tras 28 años. No nos conformamos: Racing DEBE jugar la Copa en 2026".
Diego Milito. pic.twitter.com/H6irekXPn1
Horas antes de que Racing jugase su partido ante Central Córdoba en Santiago del Estero, la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (APREVIDE ) emitió un comunicado donde sancionó al club por el uso masivo de bengalas, humo y fuegos artificiales en el recibimiento ante Flamengo, en el partido de vuelta de semifinales de la Libertadores.
Pese a las advertencias del organismo, el Cilindro se convirtió en un festival visual que recorrió el mundo y fue el eje del encuentro hasta que quedó fuera del torneo continental. La APREVIDE consideró que se incumplieron normas de seguridad y aplicó una clausura de 30 días, que se traduce en tres partidos sin público en el torneo local.

En el partido correspondiente a las 14ª fecha del Torneo Clausura, Racing igualó 0-0 ante Central Córdoba en Santiago del Estero, en un encuentro trabado y con pocas situaciones claras.
Costas paró un equipo medianamente alternativo, ya que muchos de los jugadores han sido titulares en otros momentos del proceso. Mostró solidez defensiva y se fue con la valla invicta, es cierto, con buen trabajo de la dupla central y Cambeses, pero le costó generar juego en campo rival. La más clara, de hecho, provino del defensor Facundo Mura, que se pasó a varios jugadores y remató fuerte pero al puesto del arquero.
En el complemento, la Academia intentó adelantarse con el ingreso de Almendra, pero no logró romper el bloque defensivo del Ferroviario. Central Córdoba apostó al contragolpe y tuvo dos buenas oportunidades en los pies de Verón y Perelló: el primero definió bien pero apenas desviado, mientras que el segundo terminó muy mal una contra que lo había dejado prácticamente solo.
El empate dejó sabor a poco para los dos, pero lo sufrió más Racing, que necesitaba la victoria después de la dolorosa caída en la copa.