La Cámara Federal porteña concedió este jueves la prisión domiciliaria a Elías Piccirillo, procesado por haber plantado droga y un arma de fuego en el vehículo del empresario Francisco Hauque, en el marco de una causa que también involucra a policías de la Ciudad.
La resolución, firmada por los jueces Roberto Boico y Martín Irurzun, sostuvo que “el avanzado estado de la investigación da cuenta de la disminución del riesgo de entorpecimiento considerado oportunamente”. En ese sentido, entendieron que los riesgos procesales pueden ser neutralizados mediante arresto domiciliario con tobillera electrónica.
El pedido había sido formulado por el nuevo defensor de Piccirillo, el abogado Gastón Francone, quien asumió la representación luego de que la Cámara Federal, en agosto, habilitara medidas de prueba solicitadas por la defensa y rechazadas por la fiscalía.

Piccirillo -detenido desde marzo en el penal de Ezeiza- está procesado por secuestro coactivo, transporte de estupefacientes agravado, encubrimiento agravado y portación ilegal de arma. Todos estos hechos se habrían producido en el supuesto armado de una falsa causa a Hauque, quien denunció haber sido víctima de un operativo ilegal motivado por una deuda millonaria con el ahora beneficiado.
La investigación también alcanza a un comisario de la Policía de la Ciudad, a un expolicía federal y a otros seis agentes de la División Robos y Hurtos, todos ellos procesados por privación ilegal de la libertad, incumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso funcional.
El caso salió a la luz cuando Hauque fue detenido en enero pasado en Recoleta, junto a su esposa, luego de que policías aseguraran haber encontrado droga y un arma en su auto. La jueza federal María Eugenia Capuchetti anuló el procedimiento al detectar irregularidades graves y concluyó que se trató de un operativo armado.
A partir de allí, la pesquisa cambió de dirección: Piccirillo quedó bajo sospecha como presunto organizador del montaje, junto con agentes de la Policía de la Ciudad. Su detención se produjo el 20 de marzo, durante un allanamiento en su vivienda de Nordelta.
En el expediente también declaró un arrepentido, que relató el rol de los policías y señaló directamente al comisario Iván Carlos Helguero como quien coordinó el falso operativo. Según su testimonio, los agentes ya sabían de antemano que en el auto “iban a encontrar dos paquetes con estupefacientes y un arma”.
Con la concesión de la domiciliaria, Piccirillo seguirá sometido al proceso, ahora desde su vivienda y bajo monitoreo permanente, mientras continúa la investigación sobre el entramado policial y las responsabilidades penales de todos los involucrados.