08/11/2025 - Edición Nº1005

Política

Interna radical

El radicalismo bonaerense intenta resurgir entre la autocrítica y los acuerdos de emergencia

08/11/2025 | Tras el revés electoral, la UCR provincial prorrogó mandatos y postergó su interna hasta 2026. Buscan evitar una intervención y recuperar cohesión en medio del reordenamiento político poselecciones.



La Unión Cívica Radical de la provincia de Buenos Aires atraviesa un momento de reconstrucción tras las legislativas del 26 de octubre. Con mandatos prorrogados, un calendario interno reprogramado y llamados a la autocrítica, el partido intenta reorganizar su vida institucional luego de meses de tensiones y derrotas.

El presidente del Comité de Contingencia, Miguel Fernández, reconoció que el radicalismo bonaerense todavía “está en pleno proceso de digerir las elecciones y encarar un nuevo ciclo político”. Desde Trenque Lauquen, donde fue intendente, Fernández admitió que el contexto político provincial “entra en una etapa de reordenamiento general” tras un año de desgaste electoral.

Para evitar una intervención judicial, la conducción logró sellar un acuerdo político con el aval de la Convención de Contingencia, encabezada por Pablo Domenichini. El entendimiento estableció un esquema de cogobierno prorrogado hasta 2026, cuando se realizarán los comicios internos. Las fechas clave serán el 10 de junio para la convocatoria, el 7 de agosto para el cierre de listas y el 6 de septiembre para la elección de autoridades.

Entre los nombres que integran el Comité figuran Elsa Llenderrozas, Walter Carusso, Sofía Gambier, Ariel Bordaisco, Miguel Ángel Lunghi y Josefina Mendoza, mientras que la Convención incluye a Érica Revilla, Ignacio Palacios, Sebastián Salvador y Agustín Maspoli, entre otros.

Fernández defendió la estrategia adoptada en la campaña, que -según dijo- contó con el aval del 70% de los intendentes radicales. “Tomamos la decisión posible en un contexto complejo. Con el diario del lunes se puede criticar, pero había que optar entre los extremos o una alternativa”, señaló.

El dirigente también advirtió sobre la situación económica de los municipios radicales, afectados por la caída de ingresos y la falta de recursos. “Se da un combo perfecto para que los municipios estén ahogados y tengan que ir al gobernador a pedir auxilio”, sostuvo.

El radicalismo bonaerense busca ahora recuperar identidad y cohesión interna, tras haber perdido peso legislativo y territorial. Su desafío será volver a convertirse en una fuerza relevante en la provincia más grande del país, sin fracturas y con una estrategia renovada para 2026.