Miguel Ángel Pichetto se ha convertido en uno de los íconos de la tarea parlamentaria desde el regreso a la democracia.
Su primer desembarco legislativo fue en Río Negro entre 1987 y 1993, y luego pegó el salto al Congreso como diputado por esa misma provincia.
Pichetto encabezó la lista del Partido Justicialista que cosechó el 30% de los votos, mientras que la UCR ganó ampliamente con el 42%, quedándose con dos de las tres bancas en juego.
En 1997, Pichetto volvió a liderar la boleta del PJ. Se renovaban dos asientos. Necesitaba salir primero o segundo para continuar otros cuatro años. El radicalismo se impuso con el 43%, y el peronismo secundó con el 37%. Silla asegurada. Tercero quedó el ascendente Frepaso con el 20%.

Ya con ocho años de experiencia en Diputados, Pichetto se presentó en el 2001 como primer candidato a senador nacional por Río Negro. Nuevamente le tocó perder: la Alianza obtuvo el 36%, mientras que el PJ orilló el 27%. Así, Pichetto se quedó con la banca de la minoría.
En el 2007 llegó el momento de renovar y por primera vez Pichetto logró ganar: el Frente para la Victoria sumó el 34% y le sacó dos puntos a la Concertación para el Desarrollo, de raíz radical.
Con 20 años consecutivos en el Congreso, Pichetto fue por su tercer periodo en el Senado y encabezó la lista del 2013 por el Frente para la Victoria. Ahora su triunfo fue arrollador: 50% contra el 26% del Frente Progresista.

En el 2019, Pichetto cumplió 26 años ininterrumpidos en el Congreso y no se postuló para renovar, sino que aceptó la propuesta de conformar la fórmula presidencial con Mauricio Macri. Como se sabe, una incursión fallida que se coronó con el triunfo de Alberto Fernández.
Finalmente, su tránsito actual en Diputados deviene de la elección del 2023. Jugó con Horacio Rodríguez Larreta y perdió la interna con la lista de Cristian Ritondo y Patricia Bullrich. De esa manera, ocupó el renglón tres en la boleta de octubre.
En el 2027 se le terminará el mandato. Ya no cuenta con el paraguas del kirchnerismo ni de Juntos por el Cambio. ¿Nueva candidatura o punto final?
FA