Los Equipos Técnicos Interdisciplinarios (ETI) de Mendoza, creados para proteger a niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad, están hoy en el centro de una tormenta desatada por una serie de denuncias por irregularidades en sus intervenciones. Hay uno por cada departamento provincial -en total son 18- y su función es evaluar los casos y aplicar medidas de protección, sin embargo, lo que debería ser un dispositivo de cuidado se ha convertido en un foco de controversia.
Según reveló la cuenta de Tik Tok @lalobamendocinaok en el pasado mes de julio, sobre los ETI pesan serias acusaciones. Se ha naturalizado en la provincia la separación de niños de sus padres sin orden judicial ni evaluación exhaustiva -basadas en informes presuntamente sesgados o incompletos- la falta de seguimiento posterior a las medidas adoptadas y que los menores institucionalizados queden sin contacto con sus familias durante meses. Y para más, en ausencia de mecanismos de control puertas adentro de los espacios en que son alojados.
Uno de los casos más resonantes es el de Daniela González, madre de Ileana, una menor de 10 años institucionalizada que se encadenó frente a un hogar de menores para exigir la restitución de su hija. Según cuenta, la intervención del ETI se basó en una denuncia que radicó su hermana por presunto maltrato a la niña y abandono de las responsabilidades enamadas del vínculo por parte de Daniela y su esposo, situación que no se pudo probar.
Los padres de la menor accedieron a realizar todo tipo de pericias ordenadas por la Justicia, las cuáles le salieron a favor, pero aún así no logran que se les restituya el cuidado de su hija. NewsDigitales conversó con la mujer, desesperada porque al día de hoy, no sabe dónde está su hija. Los ETI dependen de la Subsecretaría de Infancias, Adolescencias y Juventudes. El caso puntual de esta nota involucra al ubicado en Rivadavia, cuya responsable es Virginia del Valle Pantone.
-¿Cómo empezó su historia?
-A mi hija la trasladan a un hogar en Maipú. Primero y principal, nos dejan en la comisaría, como retenidos con mi hija. A ella la asustaron. Nos habían puesto un policía en custodia de nosotros y nos dicen que tenemos que esperar. Llega gente del ETI de Rivadavia, que en realidad no podía intervenir porque es otra circunscripción.
-¿Cómo es eso?
-O sea, es otro lugar. Tenía que haber intervenido el ETI de Santa Rosa -lugar donde vive la familia- y no el ETI de Rivadavia.
-Bien...
-Llegaron las chicas del ETI de Rivadavia. Tres personas, de las cuales dos sabíamos quienes eran y otra persona que nunca supimos, nunca nos dio el nombre, nunca se presentó, nunca absolutamente nada.
-¿De esa forma, en una comisaría se llevan a su hija?
-Claro, ahí viene una chica policían y me dice que se tiene que llevar a mi hija y yo le digo "no, yo la acerco hasta donde la tenés que llevar" y le pregunto "¿por qué te la tenés que llevar?" Entonces me la saca ami hija, se la lleva y como mi hija no quería entrar a la habitación a donde se la llevaban, la reduce la meten adentro de una habitación.
-¿Había dos que usted las conocía?
-Se acercan estas chicas del ETI, Virginia Pantone y Laura Pereira, sin ningún papel. No nos entregan ningún papel, no nos dicen nada y yo le pregunté "¿Pero dónde te la llevas? Dame un papel para que te firme y me dice no te puedo dar información, no te puedo dar absolutamente nada, no te voy a dar información". Le digo bueno, "espérate que llegue el abogado". No, me dice "no hay abogado, acá no hay nada". Cuando ellos se van ellas, nos hacen salir y veo que a mi hija le agachan la cabeza y la meten directamente al auto del ETI. Se la llevan, como si mi hija estuviera presa.
-Virginia Pantone no es una una persona más en esta historia, es quien está a cargo del ETI Rivadavia...
-Claro, ella es la abogada del ETI Rivadavia.
-¿Ella personalmente se hizo cargo del operativo?
-Ella es como que movilizó todo, pero nunca nos dio una explicación, nunca nos dijo nada. A todo esto, a mi hija se la llevan. Me dice que la van a llevar al Notti (Hospital Notti) Le pregunto "¿por qué al Notti?" y no me contesta. Esto fue un día viernes. Me llamaron esa noche y me dijeron que la nena estaba en la casita de resguardo, al lado del hospital. Bueno, nosotros al día sábado nos dirigimos al hospital y descubrimos que mi hija nunca había sido ingresada al Notti. Me voy a la casita de resguardo -que se llamaba Casita de McDonald's- y me dijeron que mi hija tampoco estaba ahí. No la encontraba por ningún lado. Nos dirigimos al ETI de Rivadavia y no nos querían dar información. Llamo a las chicas de Missing Children y nos dicen que mi hija estaba en Godoy Cruz.
-¿Fueron para allá?
-Sí. Mi hija estaba en un "intermedio", que es como le dicen a donde están los chicos que sufren de adicciones, de drogadicción, de robos y demás.
-Vamos a poner un punto acá. Una chica de familia bien, que sin motivo, sin causa aparente, la están sacando de su hogar y la están llevando a un hogar para chicos con adicciones, o sea, con una realidad completamente diferente, a la cual su hija no está adaptada, porque no es de ese mundo....
-Claro, es un hogar alternativo que está enfrente, es como decir, una casita que está enfrente de los chicos que están con adicciones. Esos chicos cruzan, es una veredita que hay y se pueden meter perfectamente al hogar, al alternativo. En ese alternativo estuvo mi hija. Yo, gracias a la Loba (en TikTok @lalobamendoinaok), busqué, busqué, busqué, hasta que encontré ahí a mi hija. Bueno, me dijeron que yo tenía orden de su restricción, que no me podía acercar y demás. Luego de ahí, a mi hija la trasladan al hogar Claveles Mendocinos.
-¿Y en qué condiciones llegó a Claveles Mendocinos?
-Mi hija entró totalmente indocumentada. No la podían ingresar en el ETI, en el alternativo, -donde estuvo primero- no la podían ingresar. Entonces, ¿Qué pasó? Pantone directamente dijo que la ingresen igual. Hicieron ellos un papel escrito y la ingresaron, pero mi hija entró totalmente indocumentada.
-¿Esto cuándo pasó?
-En julio pasó. Cuando pasa todo esto, mi hija entra a Claveles Mendocinos. En Claveles Mendocinos se escapan cuatro nenas. De esas cuatro nenas, yo me comunico con una mamá. Esta mamá me dice que no sabía con cuál eran las otras dos nenas, porque dos eran hijas de esta mamá y otras dos no sabían. Entonces yo me encadeno para pedir, por favor, dónde estaba mi hija. Ahí llegan los de la DGP, los de la DSA.
-Le voy a pedir, por favor, que me aclare qué son las siglas, para que entiendan los lectores fuera de la provincia de Mendoza...
-Lo de la DSA son los de cuidados alternativos que se vendrían a ser, que son ya los que se hacen cargo de los niños que están en los hogares. Y la DGP es como la dirección general de los ETI. Llegan ellas -yo estaba encadenada- las mismas del hogar llaman a la policía. Yo le grité a mi hija que estaba ahí, que estaba luchando por ella. Cuando entra el policía y pide el expediente, no había expediente. No encontraban el expediente de mi hija, absolutamente nada, no encontraban ni siquiera el orden de restricción que supuestamente el papá y yo teníamos. Bueno, a todo esto yo estuve ahí como una hora y le dije a la policía que me desencadeno, pero que me digan que mi hija está bien. Luego de esto, pasa un mes y diez días más o menos y a mi hija le abren la puerta del hogar y le piden que se vaya.
-Esto es gravísimo. Una menor, sustraída de su familia, de buenas a primeras las autoridades de este lugar le abren la puerta para que se vaya ¿Ni siquiera llamaron a sus padres para que la vayan a buscar?
-No, nada, absolutamente nada. Es más, supuestamente nosotros nos quitaron a nuestra hija porque no iba a la escuela, ¿verdad? Bueno, mi hija después de las vacaciones de julio podría haber ingresado a la escuela. Desde el hogar nunca la mandaron a la escuela porque no la dejaban salir, y de repente, le abrieron la puerta con otra compañerita más y una cuidadora, una que ahí adentro les tienen que decir "tía", se fue a la plaza. Y de ahí la cuidadora se fue y mi hija y la otra nena se fueron del hogar.
-Hay que poner el acento en esto porque abandonaron a su suerte a menores de edad en la calle...
-Totalmente, totalmente. Por eso es que yo estoy desesperada. Porque imagínense que mi hija, al día martes recién le dieron aviso a nuestro abogado de que mi hija ya no estaba en el hogar. Y mi hija se había ido el día sábado. Nosotros con el padre salimos a buscar a nuestra hija, desesperados. Hasta que nos llega un llamado. Yo me esperaba la peor noticia, y cuando hablo, me dicen "por favor vení a buscarla y fíjate en el estado que está".
-¿Cómo la encontraron?
-Mi hija estaba totalmente dopada. Yo no la reconocí porque estaba totalmente drogada. Cuando la veo tenía una de las venas reventada en el brazo, estaba cortada con vidrios sus brazos. Entonces yo hablo con ella y le pregunté "hija ¿qué te pasó?" Ella me miraba fijo y no sabía que hablarme. Entonces me dice, la mamá que la encontró "o la llevas a la sala y que le hagan ya un estudio, o si la querés resguardar, resguardala". Y me dice "pero dale mucho líquido, porque esta nena está totalmente dopada".
-¿Qué le daban?
-Eso le pregunto y me dijo que le daban Lorazepam y que en la comida le echaban un polvito blanco. Y le pregunté qué le pasó en la venita. "Me llevaron a una salita muy, muy escondida en un lugar muy chiquito donde habían muy poquitas personas" dice "primero me inyectaron algo y después me sacaron sangre. Y después me inyectaron algo en la vena y que le dio mucho sueño.
-¿La intención de esta gente era tenerla adormecida para que no se queje y no pida volver a su casa?
-Claro, entonces yo le pregunté por qué tenía los brazos cortados y me contestó que se cortó con vidrio, que se quería morir porque no aguantaba más ahí adentro. También me dijo que le dolía el hombro porque estaba llorando mucho en el baño y que una de las tías le torció el brazo y la tiró al piso, y que eso le descolocó el hombro. Entonces dice que la llevaron al médico y le dieron Lorazepam.
-Para todo esto ¿a qué altura del año estamos hablando ya?
-En agosto.
-Bien, entonces ¿ahí es cuando se reencuentran, tienen todo este diálogo y la ponen a resguardo?
-Claro, la ponemos a resguardo. La intentamos desintoxicar, pero ella, como que estaba muy nerviosa y tenía mucho miedo. Y nos empezó a contar todo. Nos empezó a contar que habían niñas dentro del hogar, y que a una de las nenas se la habían llevado como para hacerle un control. Y que cuando volvió, los choferes que se la habían llevado la habían abusado. La dejaron ahí, en la cama tirada, y después quisieron llevarse a mi hija. Ella se encerró en la habitación. Todo esto me cuenta ella.
-¿Hasta cuándo pudieron estar con su hija?
-Bueno, ahora el 24 de octubre a mi hija la encuentran. Nos llevan a la policía, supuestamente para que mi hija diera el testimonio y que diga con quién quería estar: si con los papás, o con quién. Pero eso fue todo mentira porque llegaron los de cuidados alternativos y nos dijeron que a mi hija se la llevaban a Malargüe.
-Cuando van a buscar a su hija, es decir, cuando la encuentran con ustedes y se la llevan otra vez. ¿A ustedes le dijeron algo sobre alguna consecuencia penal que pudieran llegar a tener?
-Absolutamente nada. No nos dijeron absolutamente nada. Es más, yo hice la denuncia por un abuso sexual que le hizo a mi papá, por el abuso que le hizo a mi hermana. Todo eso quedó parado. Por el tema nuestro, el abogado pidió elevantamiento de la medida que nos priva de estar con nuestra hija porque nosotros nos hicimos pericia por parte y salieron que estamos aptos para ser padres, pero la jueza no accede a nada. Ni siquiera le responde a nuestro abogado, salvo para disculparse por la demora.
-¿Al momento que le sacan a su hija por segunda vez, no sufrieron alguna presión por parte de la Policía de Mendoza?
-No, al contrario. Nos trataron muy bien y me dijeron: "mamá, no se preocupe. Vamos a ir hasta la Policía, la nena va a declarar y usted se va a volver". La policía nos habló, le habló a mi hija y le dijo: "no te preocupes gordita que vamos a ir, vos vas a declarar vas a decir con quién querés estar y te vas a venir y vas a tomar un helado con tu mamá, ya vas a ver con tu papá y este tormento se va a terminar" mi hija preguntaba: "¿me lo jurás?" y le dijo que sí y cuando quisimos acordar, llegaron los de cuidados alternativos y me dijeron que se la llevaban a Malargúe. Yo le digo (a los funcionarios) "bueno, dame un papel para firmarte" mi hija se agarraba de mi ropa y pedía que no la deje porque la iban a maltratar. La cuestión es que nos dicen que se la llevan a Malargúe y a todo esto yo no tengo ninguna noticia de mi hija absolutamente nada, yo no tengo noticias de mi hija.
-¿Y a dónde se la llevaron?
-Le dijeron a mi abogado que mi hija estaba en Claveles Mendocinos (N.de la R: un hogar de tránsito). Yo voy a Claveles Mendocinos y me dijeron que mi hija nunca fue ingresada. Mi hija no está en Claveles Mendocinos, o no está en Malargüe, no está.
-¿No saben dónde está?
-No, no sabemos dónde está nuestra hija. O sea, nos dijeron que, supuestamente, nuestra hija estaba en Malargüe, pero mi hija no está ahí, porque en el ETI figura como que mi hija está en Claveles Mendocinos.
-Claro, en los papeles se puede poner cualquier cosa, pero la realidad es que cuando uno va a buscarla no la pueden inventar si no está...
-No está y esa es la desesperación. Justamente una tía de ella, por parte de mi pareja, ha ido para preguntar y le dijeron: "No, acá no sigue Ileana, desde que se fue Ileana ya no puede volver a ingresar al mismo hogar, así que Ileana acá no está". No nos han llamado por teléfono desde que se la llevaron el 24 de octubre hasta hoy, no sabemos absolutamente nada de mi hija. No sabemos el paradero de ella.
-Han intentado escalar posiciones en el gobierno mendocino, no sé alguna carta al gobernador o algo digamos como para darle también a esto otro estado público, ¿no?
-He hecho todo he hecho todo. Nos hemos movido por todos lados, hemos ido al Polo Judicial, hemos ido a todos lados y todo el mundo nos dice lo mismo. Lo que pasa es que la jueza Lina Rosa Morcos (a cargo del Tercer Juzgado de Familias Secretaría N° 1) no quiere acceder a dar levantamiento a la medida de restricción de acercamiento, tampoco quiere acceder a darle la cámara Gessell a mi hija, porque sabe perfectamente que si habla se va a destapar la olla, porque a mi hija la abusaron y si habla de lo que pasó en el hogar, va a contar que fue golpeada, que fue drogada, que le inyectaron, no sabemos qué, en su cuerpito, que tenía las venas reventadas y todo lo que vivió. Que le daban comida podrida y encima si la vomitaba se la tenía que comer.
GZ