“El Presupuesto tiene que tener una visión de crecimiento. En Córdoba estamos trabajando en uno que, con baja inflación, incentive la producción, genere empleo y reduzca la presión fiscal”, señaló el mandatario provincial tras el encuentro, que se extendió por casi una hora y media.
Llaryora explicó que la reunión giró en torno al rumbo económico del país y a los consensos necesarios para impulsar políticas de crecimiento. Sin embargo, marcó diferencias respecto del proyecto oficial: “Tiene que haber ajustes que contemplen las realidades productivas y sociales de cada provincia”, remarcó, sin detallar los cambios específicos que propone.
Consultado sobre la reforma laboral que impulsa el gobierno de Javier Milei, el gobernador aclaró que “todavía no hay ningún proyecto presentado” y pidió tener en cuenta el impacto que una modificación de las normas podría tener sobre las pymes. “Un juicio laboral puede hacer cerrar a un pequeño comercio. En una reforma no puede haber retrocesos; hay derechos adquiridos y diferencias entre medianos y grandes”, afirmó.
Llaryora también confirmó que durante la reunión no se abordó el reclamo por la deuda de la caja de jubilaciones, que continúa en la Justicia.
Por último, destacó el nuevo clima político: “Veo con buenos ojos que se abra una etapa de diálogo y consenso, dejando atrás los agravios y las confrontaciones. Es el camino para mejorar la vida de los argentinos”, concluyó.
El encuentro se enmarcó en la serie de reuniones bilaterales que Santilli mantiene con los gobernadores para buscar acuerdos que faciliten la aprobación del Presupuesto 2026 y las reformas laboral, impositiva y del Código Penal.
ND