Después de un 2024 caótico en el Congreso, donde La Libertad Avanza (LLA) expuso su falta de experiencia política, el oficialismo decidió abrir una suerte de “escuela legislativa” para sus propios diputados. Este martes, en el anexo de la Cámara de Diputados, comenzó un curso de capacitación para los legisladores libertarios que asumirán el 10 de diciembre, con la intención de que esta vez sepan cómo se debate y se vota una ley.
La idea fue de Karina Milei, que entregó a cada participante un ejemplar de la Constitución Nacional y del Reglamento de la Cámara. En la práctica, se trató de una clase básica sobre cómo moverse dentro del recinto, presentar proyectos, pedir la palabra y no quedar fuera de juego en el debate parlamentario. Una postal del aprendizaje acelerado que atraviesa el oficialismo a dos meses de iniciar un nuevo período legislativo.
Las clases, coordinadas por Adrián Pagán, secretario parlamentario, incluyen nociones sobre reglamento, administración y comunicación. Participaron como tutores Nicolás Mayoras, Silvana Giudici, Nadia Márquez y Alberto “Bertie” Benegas Lynch, que oficiaron de guías para los debutantes. El foco está puesto en el Presupuesto 2026 y las futuras reformas laboral y tributaria, proyectos que el presidente Javier Milei busca imponer con un bloque disciplinado.
El curso, tres veces por semana, es también un ensayo de control político. Karina Milei y su equipo pretenden reforzar la cohesión interna de los libertarios y evitar las improvisaciones que marcaron la gestión anterior, cuando varios diputados votaron sin coordinación o se ausentaron en momentos clave. “Ahora queremos un bloque que entienda lo que vota”, se escuchó en la Casa Rosada, en tono de autocrítica y advertencia.
A un año de llegar al poder con la promesa de “dinamitar la casta”, los libertarios aprendieron que gobernar no se improvisa. Y que para legislar, antes hay que estudiar.