Morgan Freeman contra la inteligencia artificial: “No me imiten”

Morgan Freeman, el intérprete de roles icónicos en Todopoderoso y Sueños de libertad, se opuso abiertamente al uso de inteligencia artificial para replicar su distintiva narración, una de las más reconocibles y codiciadas en Hollywood. Con 88 años, el actor no oculta su irritación ante la tecnología que permite imitarlo a la perfección. En una entrevista con The Guardian, Freeman dejó claro que no ha dado su consentimiento para que su voz sea sintetizada, a diferencia de casos como el de James Earl Jones, quien permitió que la IA recreara su interpretación de Darth Vader tras retirarse del personaje.

“Estoy un poco molesto, ¿sabés?”, confesó Freeman a The Guardian. “Soy como cualquier otro actor: no me imiten con falsedad. No lo aprecio y me pagan por hacer cosas como esas, así que si lo van a hacer sin mí, me están robando”, señaló.

Su reclamo no es solo personal, sino ético: la IA no solo invade la propiedad intelectual de los intérpretes, sino que amenaza con desplazar empleos reales en una industria ya sacudida por la automatización. Freeman subraya que su voz no es un recurso público, sino parte de su oficio, por el que ha cobrado durante décadas.

Sueños de Libertad, un clásico narrado por Morgan Freeman.

El rechazo se extiende a figuras completamente artificiales como Tilly Norwood, presentada en septiembre como la primera “actriz de IA”. “A nadie le gusta porque no es real y eso le quita el papel a una persona real, así que no va a funcionar muy bien en el cine o en la televisión… El trabajo del sindicato es mantener a los actores actuando, así que habrá ese conflicto”, expresó el protagonista de Conduciendo a Miss Daisy. 

La opinión de Morgan Freeman se da justo en la semana en la que Michael Caine decidió vender su voz a una empresa que trabaja con IA. Se trata de ElevenLabs, para la que además firmó un acuerdo para promocionarla abiertamente.