16/11/2025 - Edición Nº1013

Policiales

Corrupción dentro del organismo recaudador

Era custodio policial de la AFIP y robó 129 computadoras del organismo

14/11/2025 | Un cabo de la Policía Federal fue procesado por robar 129 computadoras de la AFIP. Usaba su rol de custodio para obtener y vender los equipos robados.



Un insólito caso de corrupción policial sacudió a la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), el organismo encargado de la aduana y la recaudación impositiva. La Justicia Federal procesó en los últimos días a un cabo de la Policía Federal Argentina (PFA) y a un comerciante, acusados de robar 129 computadoras portátiles y casi 400 mil pesos de la sede central de la entidad.

El sospechoso principal es Diego Jesús Alballay, un cabo de la PFA, que prestaba funciones en la División Seguridad y Custodia de la ex AFIP, dentro del mismo edificio donde ocurrieron los robos. La investigación determinó que su rol como custodio le facilitó el acceso a las oficinas de los distintos pisos del organismo. “Conocía cuáles eran los puntos ciegos donde no había cámaras de seguridad”, planteó una fuente del Juzgado Federal Criminal y Correcional Nº12, a cargo del Julian Ercolini.

La investigación reveló que Alballay cometió ininterrumpidamente 38 hechos delictivos, que se extendieron desde enero de 2024 hasta marzo de 2025. En total, se le atribuyó la sustracción de 129 computadoras portátiles y sumas de dinero de distintas oficinas de la sede central ubicada en Hipólito Yrigoyen 370. Uno de los días -se constató en la causa- que se llevaron 8 computadoras. Los empleados de ARCA comenzaron a realizar las denuncias penales durante casi un año en distintos juzgado de la Ciudad de Buenos Aires.

Las computadoras sustraídas eran, en su mayoría, modelos "Dell Latitude", propiedad de los empleados de la agencia de recaudación. La Justicia diferenció 29 hechos como "robo" (por forzamiento de armarios o candados) y 9 como “hurto”, es decir que no ejerció violencia para llevarse los objetos.

Infraganti

El rastro del policía llegó a su fin el 22 de marzo de 2025, cuando fue detenido infraganti por sus propios compañeros. Lo encontraron al cabo a oscuras, iluminándose con un celular, en una zona de oficinas donde se constataron destrozos y forzamiento de escritorios. Ese episodio impulsó la unificación de todas las denuncias por faltantes que ocurrían en el edificio.

Pero, el policía Aballay no actuaba solo. La Fiscalía determinó que un comerciante de Lanús, Giuliano Guido Coppa, se dedicaba a la venta de las notebooks robadas en su local. Coppa fue procesado como el eslabón clave en el encubrimiento de los bienes robados que adquirió las computadoras portátiles robadas por Alballay "a sabiendas de su procedencia ilegítima y con ánimo de lucro", para luego re-acondicionarlas y revenderlas. Los equipos era promocionadas para la venta en Facebook e Instagram, que coincidieron en marca y modelo con los faltantes en el organismo fiscal.

La conexión entre el policía ladrón y el comerciante encubridor se consolidó con el análisis de las cuentas de Mercado Pago. Se detectaron múltiples transferencias de altos montos provenientes de la cuenta de Giuliano Coppa a la de Diego Alballay, las cuales coincidieron con fechas muy próximas a la detección de los robos de las computadoras.

A Diego Jesús Alballay se le imputaron los delitos de robo agravado y hurto agravado, en ambos casos, por el hecho de ser un integrante de las fuerzas de seguridad, lo cual aumentó la pena prevista en el Código Penal. A Giuliano Guido Coppa se lo procesó por encubrimiento agravado, debido al ánimo de lucro y la habitualidad en la adquisición y reventa de bienes robados. Ambos fueron embargado por 200.000.000 de pesos cada uno.