Dolor y bronca en Tucumán: murió la nena de siete años baleada mientras jugaba y detuvieron a dos sospechosos

La provincia de Tucumán sigue conmovida por la muerte de la nena de siete años que había sido baleada en la cabeza mientras jugaba en el patio de la casa de su abuelo, en el barrio San Cayetano. La tragedia ocurrió el jueves por la tarde y derivó en una intensa búsqueda policial que, finalmente, permitió detener a dos sospechosos durante la madrugada de este sábado.

El episodio se produjo alrededor de las 16.30 del jueves, cuando la víctima jugaba con su bicicleta junto a otros dos chicos en la vereda de la vivienda ubicada en la calle Ricardo Rojas. Por el calor de la jornada, los menores se refrescaban con agua cuando una moto frenó bruscamente y cuatro jóvenes descendieron del rodado. Sin mediar palabra, uno de ellos efectuó al menos cinco disparos contra la fachada de la casa. Uno de esos proyectiles impactó de lleno en la frente de la niña.

La escena se volvió desesperante. Mientras los demás chicos lograron correr hacia el interior de la vivienda, la pequeña quedó inmóvil sobre la bicicleta. “Cuando la veo que seguía arriba de la bici, me acerco y ahí cae. Ahí puedo ver que tenía el impacto de bala”, relató una tía de la víctima.

Ante la demora de la ambulancia, un vecino trasladó a la menor en moto hasta la Policlínica de San Cayetano, desde donde fue derivada de urgencia al Hospital de Niños. Ingresó al quirófano y se le practicaron maniobras para bajar una hipertensión craneana refractaria, pero su cuadro seguía siendo crítico. El viernes por la noche, los médicos informaron a la mamá que la niña había sufrido muerte cerebral. Finalmente, la pequeña murió este sábado.

En paralelo, la Unidad Fiscal Especializada en Homicidios I, encabezada por el fiscal Pedro León Gallo, ordenó una serie de allanamientos para dar con los responsables. Tras varios intentos sin resultados, esta madrugada, cerca de las 3.30, un amplio despliegue policial permitió acorralar y detener a dos sospechosos: un joven de 18 años y un menor de 15. El auxiliar fiscal Lucas Maggio dispuso que el mayor quedara aprehendido y que el adolescente fuese alojado en el CAD.

Según las primeras líneas de la investigación, los atacantes actuaron en grupo y uno de ellos incluso filmó la balacera con un teléfono celular. Los investigadores analizan si el ataque estuvo vinculado a conflictos previos en el barrio.

La familia de la víctima, devastada por la pérdida, había protagonizado una protesta en la entrada del hospital tras denunciar que no recibían información clara sobre el estado de la niña. La noticia de su muerte profundizó el dolor y reavivó el reclamo por justicia.

Con las dos detenciones ya concretadas, la fiscalía avanza para determinar la responsabilidad de cada uno de los implicados y dar con el resto del grupo que participó del ataque. El caso sigue en plena investigación.