El Gran Premio de Las Vegas, además de todo lo que dejó en la pista, estuvo marcado por las declaraciones contrapuestas de los pilotos de Alpine, Pierre Gasly y Franco Colapinto. Este contraste ha puesto de manifiesto tensiones internas y diferencias en las percepciones sobre el desempeño del equipo.
Pierre Gasly, que finalizó en el 13° lugar, se mostró abiertamente satisfecho con su rendimiento en clasificación, resaltando que haber llegado a la Q3 fue señal de progreso. Atribuyó este avance a la capacidad del equipo para identificar y resolver problemas que habían afectado su desempeño a mitad de temporada.
“Estoy muy contento con mi rendimiento en clasificación”, afirmó Gasly, subrayando un sentimiento de optimismo inusual dado el contexto de carrera, a pesar de las dificultades enfrentadas en pista.
Por otro lado, Franco Colapinto, quien terminó 15°, no compartió el entusiasmo de su compañero. El joven piloto argentino expresó su frustración por las condiciones de su auto durante la carrera, describiéndolo como "un desastre".
Según Colapinto, su vehículo carecía absolutamente de adherencia, lo cual complicó su conducción en las curvas, una crítica contundente que se aleja de la visión positiva de Gasly.

La carrera no estuvo exenta de incidentes que añadieron tensión al ambiente entre los pilotos de Alpine. Gasly no pudo ocultar su descontento tras verse envuelto en un incidente al inicio de la carrera, provocado por un golpe de Gabriel Bortoleto, que afectó al difusor trasero de su monoplaza.
No obstante, el francés mantuvo una perspectiva algo optimista, destacando aspectos positivos en su rendimiento personal, especialmente en la fase clasificatoria. Por otra parte, Colapinto continuó criticando su monoplaza a lo largo de la jornada, sugiriendo que los daños o fallas en el auto impidieron un mejor desempeño.
A pesar de la discordancia en las declaraciones, ambos pilotos reconocieron el duro trabajo del equipo. Gasly manifestó: “Fue bastante duro, pero creo que en general hicimos un buen trabajo”, mientras que Colapinto, aunque crítico, indirectamente reconoció las limitaciones que enfrentó debido al estado de su vehículo.