El municipio de General Viamonte, uno de los más afectados por las inundaciones en la provincia de Buenos Aires, fue el último martes epicentro de un fuerte reclamo del campo. Los productores se movilizaron al Concejo Deliberante, con sede en Los Toldos, en rechazo de la suba del 184% de la Tasa Vial -un tributo que los productores pagan para el arreglo y mantenimiento de los caminos- que el oficialismo logró imponer por mayoría.
Hasta el recinto donde la Asamblea de Concejales y Mayores Contribuyentes debía convalidar los cambios en la ordenanza fiscal e impositiva -que ya habían sido aprobados en la sesión preliminar- se acercaron decenas de productores del partido, convocados por la Asociación Rural.
Es que en el contexto que atraviesa la localidad -que tiene alrededor del 60% de los campos anegados- el aumento impulsado por el intendente Franco Flexas -de la UCR- fue tildado por los productores como “avasallante”.
Tras la votación en el HCD que estableció los nuevos valores de la Tasa Vial, el presidente de la Asociación Rural, Julio Legnani, advirtió que la medida va en contramano de los alivios impositivos que suelen otorgarse a productores afectados por las inundaciones. “La verdad es que fue no tener empatía con el productor y no entender la situación que estamos viviendo”, planteó en declaraciones a NewsDigitales.
En ese sentido, el dirigente rural explicó que “la zona de Los Toldos tiene partes muy afectadas y todavía falta para dar solución a todo eso. Entonces aumentar la tasa en este contexto nos pareció de esta manera y con este importe del 184% avasallante”, manifestó.
También alertó por el drama social que se vive en pueblos, parajes y zonas rurales: “Tienen que entender que el uso de los caminos afecta, a su vez, a las familias. Hay chicos que hace 6 meses que no van a la escuela porque iban a una escuelita rural y no se puede llegar. Entonces, creo que el contexto no es el apropiado para hacer esta suba de esta manera”, insistió.
Y razonó: “Este no era un año para hacerlo, ya que estamos en una situación de emergencia y de incertidumbre total”, dijo, en relación al difícil panorama económico que enfrentan los ruralistas: “Hay productores a los que se les va a aumentar el 180% cuando tienen más de la mitad del campo inundado. No sabés si vas a poder cosechar el trigo, si vas a sembrar soja, si vas a llegar al campo, si vas a poder trasladar hacienda”, sostuvo Legnani.
El titular de Asociación Rural, Julio Legnani, se refirió a la relación de la entidad con el gobierno municipal, a la que describió como un vínculo institucional “fuerte”, pero que quedó deteriorado por el aumento sorpresivo de las tasas. “Desde que asumí hemos entablado comunicación y hablado específicamente de trabajos que se tienen que realizar de urgencia en el partido. Apoyamos, junto al municipio, los reclamos de obras frente a Provincia y a Nación, tanto de hidráulica como del manejo del agua”, reconoció.
Sin embargo, observó que la gestión del intendente Franco Flexas se mostró inflexible con la suba de tasas: “Fue una postura muy rotunda del municipio: ‘esto es lo que yo preciso y es lo que voy a cobrar’. Al final tampoco se pudo trabajar con los caminos y no llegamos a un acuerdo en común”, lamentó.
Incluso, la entidad rural reconoció el retraso en los valores de las tarifas y se mostró abierta a discutir un incremento moderado: “Se llevó una propuesta de hasta un 70% de aumento, que nos parecía tolerable para ir recomponiendo la tasa, proponiendo que el año que viene se vuelva a tratar y se vuelva a compensar. Pero dijimos que este no era un año para hacerlo, ya que estamos en una situación de emergencia y de incertidumbre total”, agregó.
Uno de los planteos más duros de la Asociación Rural fue el compromiso que exigirán al municipio tras la suba aprobada. “Lo más importante ahora es que el municipio reconozca que tienen los fondos, porque dijeron que estos eran los fondos que precisaban para mantener los caminos”, afirmó Julio Legnani. Y sentenció: “Ahora que los tienen, deben saber que el mínimo reclamo por un pozo está totalmente justificado”.
En ese marco, la entidad pidió reflotar la Comisión de Caminos creada tiempo atrás por ordenanza para transparentar fondos, gastos y obras: “Que se muestre en qué se invierte lo que hoy nos exigen pagar bajo el agua”, observó.
Los reclamos también incluyen una agenda de infraestructura hídrica: obras hidráulicas, revisión de canales, profundidades y anchos, además del problema recurrente de los puentes usados como reguladores de caudal. “Eso lleva a que el canal arrastre el puente y deje incomunicado al partido en muchas partes del distrito”, sostuvo.
Más allá del abordaje institucional, algunos de los productores rurales que se acercaron al recinto evalúan ir a la Justicia para frenar el aumento de la tasa.
“Hay gente que seguramente va a hacer algún reclamo judicial. Hay productores que se van a negar a pagar esto”, reconoció Legnani. Aun con el diálogo político e institucional como prioridad, la entidad se mostró colaborativa con quienes decidan canalizar su descontento por la vía judicial: “Desde la Sociedad Rural están las puertas abiertas para quien necesite acompañamiento”, concluyó.