Karina Milei y Adorni acompañaron la jura de Bullrich sin invitación formal

La interna en el Gobierno volvió a quedar expuesta. La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, se hicieron presentes en el Congreso para acompañar la jura de Patricia Bullrich como senadora de La Libertad Avanza, pese al rechazo de la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien -según altas fuentes oficiales- había intentado frenar su participación en la ceremonia.

Cerca de la titular del Senado negaron tener información sobre alguna objeción formal. Sin embargo, desde la Casa Rosada sostienen que Villarruel manifestó su incomodidad ante la presencia de los funcionarios y que Adorni y Milei buscaron inicialmente evitar una escena de tensión pública. Finalmente, fue la propia Bullrich quien insistió en que ambos asistieran al acto.

En un gesto político cargado de simbolismo, Karina Milei y Adorni llegaron antes de las 11 al Palacio Legislativo, sin invitación oficial, para presenciar el recambio senatorial. La maniobra se leyó en el Gobierno como una demostración de fuerza frente a la vicepresidenta, cuya relación con el Ejecutivo está deteriorada desde hace meses.

El vínculo entre Villarruel y la Casa Rosada se encuentra prácticamente roto. La funcionaria opera con agenda propia y sin diálogo fluido con el presidente Javier Milei, quien llegó a calificarla en privado como “traidora”, particularmente después del tenso cruce durante el Tedeum del 25 de mayo, cuando le negó el saludo en la Catedral Metropolitana.

En el oficialismo circula la idea de que Villarruel busca posicionarse políticamente por fuera del Gobierno. Una fuente de máxima confianza del Presidente lo expresó sin rodeos: “Victoria intenta voltearnos para asumir y fue una traidora desde principios de 2023 sin importarle el futuro de los argentinos de bien”.

Las tensiones escalaron en las últimas semanas luego de que la vicepresidenta protagonizara un intercambio en redes sociales en el que respondió con aprobación a publicaciones que la proponían como candidata presidencial para 2027. El gesto generó sorpresa y burla en sectores cercanos al mandatario. “¿En serio le dio ‘me gusta’ a eso? ¡Qué sorpresa!”, ironizó un integrante de la mesa chica.

Durante esa noche de actividad virtual, Villarruel también replicó mensajes que criticaban al Gobierno, del cual ella misma forma parte, y lanzó dardos directos contra la secretaria general de la Presidencia. “Lo importante es que los ciudadanos sepan que no robo, laburo mucho y con responsabilidad y que no he realizado ninguna traición. El resto son chismes de panadería. Ustedes creen que se debe ser servil y no lo soy”, aseguró frente a uno de sus seguidores.

En ese clima de desconfianza creciente, la presencia de Karina Milei y Adorni en la jura de Bullrich no hizo más que profundizar un conflicto que ya condiciona el equilibrio interno del oficialismo. El acto legislativo terminó convertido en otro capítulo de una disputa que, lejos de moderarse, parece escalar día a día.

GZ