Récord histórico: avistan más de 90 cóndores andinos juntos en Mendoza

Un hecho significativo para la conservación de la fauna silvestre en Argentina fue registrado en la localidad de La Carrera, Tupungato: se observaron de manera simultánea más de 90 ejemplares de cóndor andino en un mismo punto, lo que constituye el mayor avistamiento documentado en el país hasta el momento.

El histórico registro fue capturado por una familia que logró filmar y fotografiar a las aves, declaradas Monumento Natural Provincial, mientras se alimentaban de una vaca muerta.

Con esta observación, Mendoza supera el récord nacional anterior, que se había registrado en San Luis con 80 aves captadas en simultáneo durante el Censo Simultáneo de Cóndor Andino el pasado octubre.

Desde el Gobierno de Mendoza destacaron que la presencia de más de noventa individuos en un único lugar es un indicador significativo del buen estado de salud del ambiente andino. El hallazgo se suma al reciente descubrimiento de un nuevo nido en el Parque Provincial Tupungato a finales de octubre.

"El registro de más de 90 cóndores juntos es una imagen impactante que confirma la vitalidad de la población local de esta especie amenazada y resalta su papel fundamental como sanitario natural del ecosistema andino”, señaló Adrián Gorrindo, jefe del Departamento de Fauna Silvestre.

El Cóndor: sanitario natural de la Cordillera

El cóndor andino se encuentra categorizado como “Vulnerable” a nivel global y “Amenazada” en Argentina, lo que hace que este registro sea aún más importante.  Ignacio Haudet, director del Departamento de Fauna Silvestre, explicó la función ecológica vital de esta ave carroñera:

Contribuye a eliminar restos de animales muertos, lo que reduce posibles focos de infección y previene la propagación de enfermedades.  Gracias a su pico fuerte, el cóndor facilita que otras aves o animales carroñeros más pequeños puedan alimentarse al abrir la piel y tejidos duros de los animales muertos.

El avistamiento demuestra la disponibilidad de alimento en la zona, la baja perturbación humana y una coexistencia saludable de ejemplares adultos y juveniles. Desde el Ministerio de Energía y Ambiente resaltaron la necesidad de continuar impulsando políticas de protección sostenidas y educación ambiental para garantizar la conservación de esta especie emblemática.