Alfredo Piro pasó por El Living de NewsDigitales para conversar con el periodista Juan Ignacio Provéndola; para empezar, se definió desde la raíz: “La primera razón del doble apellido es un reconocimiento a mi vieja. Gracias a la vieja, el tango”. Dijo que el gesto también nació de una necesidad vital: “La búsqueda es reinventarse. El día que encuentre la fórmula de lo previsible, pongo un almacén”.

Además, confesó que el cambio le dio aire creativo: “Es la excusa para hacer cosas nuevas. Siempre fue eso. Cada proyecto es mudar de piel”. Y hasta se permitió una sonrisa: “A la vieja le gusta más que diga cantante. Cantora se enoja… o se enojaba, por suerte ya no”.
Sobre Canciones de Dos Puertos, explicó: “No nació como disco. Fue una sucesión de presentaciones. El disco terminó siendo la resultante”. Recordó la dinámica con Carlos Filipo: “Nos une una amistad enorme. Él es la síntesis entre Roberto Grela y Black Sabbath, pero con acústica”.
El concepto de grabar en vivo lo guió desde el comienzo: “Decidimos hacer lo que hizo Vinicius: armar la Fusa dentro del estudio. Con gente, mesitas, sillitas. Los micrófonos tomaban el ambiente”. Y atribuyó la decisión a un impulso sencillo: “Queríamos capturar la magia antes de que se escurra con el tiempo”.
El músico describe el repertorio como una deriva natural: “Una canción fue llevando a la otra. Es la síntesis del aquí y ahora”. Y celebró esa mezcla entre siglos y estilos: “Calderón de la Barca y Discepolín se dan de bruces. Hay 300 años de diferencia, pero conviven perfecto”.
El músico sostuvo que la posición política surge sola: “Uno es juglar de su tierra y de su presente. Tiene el compromiso tácito de cantar lo que pasa”. Rechazó la idea de separar arte y contexto:
“Pretender que la música no tiene nada que ver con lo social es ser ciego. Todo te atraviesa”.
Incluso al cantar repertorio antiguo encuentra un puente con la actualidad: “Hasta recitando La vida es sueño aparece el presente. Uno lo reinterpreta desde el hoy”. Y remató con una frase que le atribuye a Zitarrosa: “Yo no soy un cantor de protesta. Canto canciones que protestan ellas”.
Sobre el show del 13 de diciembre en Pista Urbana, lo definió con entusiasmo: “Es una casa afable, casi familiar. Todo pasa por ahí en algún momento”. Adelantó que estará acompañado por Carlos Filipo, Federico Ghazarossian y Celsa Mel Gowland: “Para mí es muy fuerte hacer tango con ellos. Eran mis ídolos”. Piro cerró la charla con un deseo simple y preciso:
“Que siga el viaje entre tango, rock, dos puertos y dos apellidos. Mientras haya canciones, hay camino”.