“La marca del Festival de Sitges ayuda a posicionar las películas como una propuesta de calidad”

Buenos Aires se convirtió una vez más en la capital del cine de género con la celebración de la Semana de Sitges, un evento que acerca al público argentino una selección de lo más destacado del cine fantástico internacional. Desde el jueves 4 hasta el sábado 6 de diciembre, la Sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín alberga la novena edición de este ciclo.

La programación de la Semana de Sitges corre a cargo del Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires y el Sitges - Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, contando con el respaldo de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina. Las actividades son de acceso libre y gratuito, con entradas disponibles en la boletería. El ciclo se inauguró con la coproducción argentino-uruguaya El susurro, seguida de la película hispano-finlandesa Singular. La clausura estará marcada por el film mexicano No dejes a los niños solos.En el marco de la Semana de Sitges en Buenos Aires, pudimos conversar con Mónica García Massagué, directora general de la Fundación Sitges, quien estuvo presente en la ciudad para participar del evento. “La Semana de Sitges en Buenos Aires es una excelente plataforma de promoción y estrecha los lazos de la comunidad del fantástico internacional”, aseguró.

-¿Cuáles fueron los criterios principales para seleccionar los largometrajes de la 58ª edición del Festival de Sitges que se presentarán en esta nueva edición de la Semana de Sitges en Buenos Aires?

-Por lo general seleccionamos producciones sin distribuidor y, en este caso, al ser un showcase de tres días, apostamos por la producción iberoamericana. A este respecto, abrimos la semana con la coproducción argentina-uruguaya El Susurro, dirigida por Gustavo Hernández, que es un nombre habitual en nuestro festival; seguimos con una propuesta española de ciencia ficción, Singular, dirigida por Alberto Gastesi, que propone una rara avis en el panorama de la producción de género en España donde la ciencia ficción es minoritaria y cerramos con el título mexicano No dejes a los niños solos de Emilio Portes, un relato sobrenatural que perturbará a los espectadores.

Mónica García Massague.

-Como directora general de la Fundación Sitges, ¿cómo evaluás el impacto de eventos como la Semana de Sitges en la difusión del cine fantástico en América Latina?

-La Semana de Sitges en Buenos Aires es una excelente plataforma de promoción y estrecha los lazos de la comunidad del fantástico internacional. A través de la programación se pone de relieve una selección de largometrajes, que forman parte de la historia de la edición. El público puede descubrirlos ahora sabiendo que son cintas que han hecho un exitoso recorrido y que cuentan con el apoyo de la crítica y la audiencia más especializada reunida cada año en nuestro certamen.

-¿Cuál es el rol de Sitges en la industria actualmente?

-El Festival de Sitges es el epicentro del género fantástico tanto para el público general como para el profesional. La industria del género ha hecho suyo el sello de Sitges y aquellas películas que pasan por nuestro certamen son distinguidas en mercados y otros festivales internacionales, recalcando el valor de haber sido seleccionadas o haber ganado algún premio en el festival. Ante la inmensa oferta audiovisual, la marca Sitges ayuda a posicionar las películas como una propuesta de calidad.

-Con el terror y lo fantástico cada vez más presente en el mainstream, ¿qué creés que cambió para que los espectadores elijan y hablen de estas películas?

-El género fantástico es uno de los que mejor “viajan”, es decir, públicos muy diversos acceden al terror o la ciencia ficción, a pesar de las distintas filmografías o las diferencias culturales. Y eso es algo que las plataformas, por ejemplo, tienen muy presente a la hora de confeccionar su oferta. Si nos fijamos, casi el 70% de lo que se consume es fantástico o los mejores éxitos de taquilla son de terror... hay una demanda que no decrece e incluso se siguen generando fenómenos populares, que dan paso a sagas como Terrifier, El teléfono negro, etcétera. El género fantástico atraviesa un momento muy interesante porque tanto ofrece títulos que son puro entretenimiento como conquista espacios de distinción cultural en premios como los Oscar o en grandes festivales internacionales.