El 6 de diciembre se celebra en Argentina el Día Nacional del Gaucho, una fecha que reconoce a uno de los personajes más representativos de la identidad cultural del país. La conmemoración fue establecida por la Ley N° 24.303, sancionada por el Congreso Nacional en diciembre de 1993, con el propósito de reivindicar la tradición gauchesca, sus valores y su profundo arraigo en la historia argentina.
La elección de esta fecha está estrechamente vinculada a la literatura: recuerda la publicación de El Gaucho Martín Fierro, obra fundamental de José Hernández editada en 1872 (ver imagen abajo). Ese poema narrativo -al que se sumaría La Vuelta de Martín Fierro en 1879- no solo se convirtió en el libro nacional, sino que también consolidó al gaucho como figura central en la construcción simbólica de la argentinidad.

En sus orígenes, el término “gaucho” se utilizó de manera despectiva para tomar distancia de los criollos y mestizos que habitaban las pampas entre los siglos XVIII y XIX. Eran jinetes nómades, expertos en la doma y la faena ganadera, cuya vida estaba marcada por la libertad y la autosuficiencia. Con frecuencia eran calificados como vagabundos o cuatreros por las autoridades coloniales.

Sin embargo, su rol fue decisivo en la defensa del territorio. Durante las luchas independentistas, los célebres “gauchos de Güemes” -las montoneras lideradas por Martín Miguel de Güemes en Salta- enfrentaron a las tropas realistas y contribuyeron a las victorias patriotas. A partir de entonces, la figura del gaucho comenzó a asociarse a valores como el coraje, la lealtad, el honor y el amor por la tierra.
La literatura profundizó esa transformación simbólica. Martín Fierro encarnó la injusticia social, la resistencia y la búsqueda de libertad, convirtiéndose en un arquetipo cultural que trascendió lo histórico para convertirse en mito nacional.
Con la creación del Día Nacional del Gaucho, la Ley 24.303 también dio paso a la formación de la Comisión Nacional del Gaucho, creada en 1996 bajo la órbita de la Secretaría de Cultura. Este organismo trabaja para promover, organizar y preservar las expresiones culturales vinculadas a la tradición gauchesca en sus múltiples formas.

La fecha se celebra en distintas provincias con actividades que revalorizan las costumbres criollas: festivales folklóricos, jineteadas, desfiles de agrupaciones gauchas, destrezas de campo, payadas y asados comunitarios. En zonas rurales, donde la cultura de la tierra conserva una fuerte presencia, las conmemoraciones adquieren un carácter especialmente significativo.
El Día Nacional del Gaucho no solo rememora una parte fundamental de la historia argentina, sino que también reafirma los valores y las tradiciones que continúan moldeando la identidad colectiva del país.