10/12/2025 - Edición Nº1037

Política

Pulso fiscal

Milei vs. Kicillof: qué deuda bloquea Nación y cuál permite refinanciar

10/12/2025 | La Casa Rosada no convalidará la nueva deuda que aprobó la Legislatura bonaerense, aunque sí permitirá refinanciar lo ya tomado. La puja expone la peor relación del Gobierno con cualquier provincia.



El Gobierno nacional se encamina a rechazar la autorización de la nueva toma de deuda solicitada por Axel Kicillof, aprobada la semana pasada en una sesión legislativa conflictiva en La Plata. En paralelo, la Casa Rosada considera avalar el rollover de las obligaciones ya existentes, una señal de rigor fiscal combinada con pragmatismo para evitar un escenario de estrés financiero en la provincia más grande del país.

El pedido bonaerense asciende a USD 3.685 millones e incluye Letras del Tesoro y créditos para la administración central, AUBASA y Buenos Aires Energía. Para concretarlo, Buenos Aires necesita aval nacional, un permiso que sí obtuvieron CABA, Córdoba y Santa Fe en los últimos meses. Ese contraste ya encendió la lectura política en el peronismo: para la Provincia, Milei impone un trato diferenciado.

La tensión se explica por una relación atravesada por la desconfianza. Buenos Aires no firmó el Pacto de Mayo y Kicillof evitó las reuniones recientes entre el Presidente y 20 gobernadores. En respuesta, el ministro de Gobierno bonaerense, Carli Bianco, pidió un encuentro formal con Diego Santilli para reclamar fondos recortados y reactivar más de mil obras paralizadas. La nota fue recibida, pero aún no respondida.

El ministro de Economía, Luis Caputo, justificó el veto apelando a la Ley de Responsabilidad Fiscal: las provincias no pueden tomar nueva deuda si los gastos corrientes superan la inflación. Según Caputo, Buenos Aires incumple ese requisito, por lo que el endeudamiento “no debería aprobarse”. La postura fue reforzada por el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, quien remarcó que solo los rollovers serán habilitados en distritos con déficit primario.

La decisión abre un nuevo capítulo en la disputa Nación–Provincia. Al bloquear el endeudamiento pero permitir la refinanciación, el Gobierno envía un mensaje doble: disciplina fiscal hacia adentro y control político hacia afuera. De fondo, el conflicto anticipa un 2026 donde la pelea presupuestaria, más que una cuestión contable, será uno de los principales escenarios de la batalla por el poder.