Diego Spagnuolo salió a defenderse con dureza. En un escrito presentado ante el juez Sebastián Casanello, aseguró que la causa por presunta corrupción en la ANDIS se sostiene sobre “una narrativa sin evidencias” y audios que ,según dice, fueron manipulados digitalmente. “Todo nació de esos audios y todo deriva de ahí”, sostuvo.
Para el exfuncionario, la imputación es “materialmente imposible”: la normativa interna, afirma, no le daba ninguna capacidad para intervenir en compulsas, adjudicaciones o manejo del sistema SIIPFIS. “No seleccionaba proveedores, no abría compulsas, no tenía acceso a los sistemas”, insistió.
Spagnuolo también cuestionó los argumentos patrimoniales usados para reforzar sospechas: dinero en una caja de seguridad, una máquina de contar billetes y refacciones en su casa. Todo, según él, previo a su ingreso al Estado o completamente explicable.
Además consideró inverosímil que, si fuera el supuesto “jefe” de una organización multimillonaria, sólo se lo vincule con cinco millones de pesos: “Es un absurdo lógico y jurídico”.
El exdirector de la ANDIS también cargó contra el manejo del expediente: denuncia que se mantuvo bajo secreto de sumario y que no se le permitió acceder a pruebas claves, limitando su derecho de defensa. “Así no se busca la verdad; se busca una condena ya escrita”, lanzó.
ND