La investigación contra Sur Finanzas, la empresa de Ariel Vallejo señalada por presunto lavado de activos, sumó este jueves un episodio inesperado que podría agravar la situación judicial del entorno del presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia.
Durante un allanamiento en un galpón de Turdera, ordenado por el juez federal Luis Armella, la Policía Federal sorprendió a Micaela Sánchez, tesorera de la compañía, cargando cajas dentro de una camioneta Toyota SW4. En el vehículo los agentes hallaron documentación y cinco teléfonos celulares escondidos debajo de un asiento.
La secuencia es analizada como un posible intento de obstrucción de la investigación, debido a que ocurrió minutos antes del ingreso formal de los efectivos al predio.
Sánchez fue demorada a unos 100 metros del lugar y quedó a disposición del magistrado, que evalúa si ordenar su detención.
El procedimiento se activó a partir de un dato inesperado. Un vecino de 72 años, identificado como “Hugo”, llamó en forma anónima a la fiscal Cecilia Incardona para denunciar que, hacía alrededor de 25 días, había visto cuatro camionetas ploteadas con el logo de Sur Finanzas descargar “un montón de cajas” en el galpón ubicado sobre avenida Hipólito Yrigoyen 11818, al lado de un lavadero de autos.
El comerciante también relató que los vehículos -Toyota SW4- hicieron varios viajes y que no levantaban la persiana frontal, sino que ingresaban por una puerta lateral, lo que le resultó sospechoso.
La fiscal corroboró la dirección y elevó el dato al juez Armella, quien ordenó tareas de inteligencia y luego el allanamiento.
El operativo reveló un volumen inusual de elementos vinculados a la firma de Vallejo:
El hallazgo refuerza la sospecha de que el lugar funcionaba como depósito clandestino para mover o resguardar material clave en el marco de la causa.
El rol de Micaela Sánchez en pleno operativo generó un impacto inmediato en la investigación. Para los investigadores, su presencia cargando cajas y ocultando celulares podría constituir un indicio de intención de remover o esconder evidencia relevante.
La situación, según fuentes judiciales, también complica al propio Ariel Vallejo, financista cercano al presidente de la AFA. Sur Finanzas aparece mencionada en contratos, operaciones financieras y gestiones con clubes que ahora están bajo lupa.
La Justicia intenta determinar si existió un vínculo operativo entre Sur Finanzas y la AFA, que habría funcionado como intermediaria en trámites y movimientos de fondos de diversas entidades deportivas.
El operativo en Turdera se suma a una semana marcada por una cadena de procedimientos:
Todo forma parte de una causa que gira en torno a una supuesta maniobra de lavado relacionada con un préstamo de 2 millones de euros destinado al Club Atlético Banfield y nunca devuelto, además de movimientos sospechosos a través de fideicomisos y proveedores de servicios de pago.
Paralelamente al allanamiento en Turdera, la Justicia también inspeccionó propiedades en Pilar pertenecientes a supuestos testaferros vinculados al círculo del “Chiqui” Tapia, en una causa que investiga la compra de una mansión que perteneció al exfutbolista Carlos Tevez.
La expansión del expediente muestra que el caso Sur Finanzas dejó de ser exclusivamente financiero: ahora involucra al corazón del fútbol argentino y a estructuras económicas que podrían haber operado durante años sin controles adecuados.
TM