Cáncer de vías biliares: crecen los casos y alertan por la alta mortalidad en el norte del país

El cáncer de vías biliares es una enfermedad poco frecuente a nivel mundial, pero con una incidencia en crecimiento y una elevada tasa de mortalidad. En la Argentina, una investigación del Intergrupo Latinoamericano de Oncología Gastrointestinal (ILOGI) reveló que la mayoría de los casos se detectan en etapas avanzadas, lo que limita las opciones de tratamiento y empeora el pronóstico.

El estudio, desarrollado durante una década con más de 900 pacientes de 20 centros oncológicos del país, permitió crear el primer Registro Epidemiológico Argentino de Cáncer Biliar. Los datos muestran una fuerte concentración de casos de cáncer de vesícula biliar en el norte argentino, especialmente en Salta, Jujuy y Tucumán.

Del total de casos analizados, más de la mitad correspondió a cáncer de vesícula biliar, una patología que afecta con mayor frecuencia a mujeres y que en algunas provincias del NOA es una de las principales causas de muerte por cáncer en la población femenina. La litiasis biliar —las conocidas “piedras en la vesícula”— apareció como el principal factor de riesgo, presente en más del 50% de los pacientes.

Los especialistas advierten que los síntomas suelen subestimarse. Dolor abdominal persistente, pérdida de peso sin causa aparente, ictericia, náuseas y distensión abdominal son algunas de las señales de alerta. Ante la persistencia de estos signos, recomiendan consultar de forma temprana.

La concientización, el diagnóstico precoz y la prevención resultan claves, especialmente en las regiones de mayor incidencia. Mantener hábitos saludables, controlar los factores de riesgo y acudir a la consulta médica ante síntomas persistentes puede marcar la diferencia.