El 14 de diciembre es una fecha grabada a fuego en el corazón del pueblo riverplatense. Hoy se cumplen 39 años de aquella gesta inolvidable, el día en que el equipo entonces dirigido por Héctor "Bambino" Veira se consagró campeón del mundo al levantar la Copa Intercontinental en Japón. Este trofeo, que hoy ha evolucionado en el Mundial de Clubes, representa la única celebración de su historia en dicha competencia.
El rival fue el sorprendente Steaua Bucarest, conocido como "el equipo del ejército". Los rumanos llegaban a Tokio tras haber consumado un triunfazo histórico en la Copa de Europa, donde vencieron al poderoso Barcelona en la final por la vía de los penales, demostrando ser un adversario temible y además la mayoría de sus jugadores pertenecían a la Selección de Rumania. El gol que le dio la gloria al "Millonario" fue obra de Antonio Alzamendi, desatando una euforia que perdura en casi cuatro decadas. La jugada que encaminó el triunfo se produjo a los 28 minutos de la primera etapa, producto de un destello de calidad y lucidez de Norberto Alonso, el emblema y capitán de aquel conjunto.

El "Beto" Alonso cobró rápido un tiro libre que le habían cometido a Juan Gilberto Funes y habilitó a Alzamendi. El delantero uruguayo definió con la cara externa del pie derecho ante el arquero Dumitru Stingaciu. La pelota rebotó en el palo y luego en el cuerpo del portero, pero Alzamendi, atento, la empujó a la red con un corto cabezazo para desatar el grito sagrado. Si bien el encuentro se desarrolló de forma muy trabada, con el correr de los minutos River logró controlar las acciones y esto convirtió al equipo del Bambino Veira en el único en conseguir el título mundial del club.
La Intercontinental fue el broche de oro para un año plagado de gloria para River Plate. El equipo no solo conquistó este ansiado título, sino que previamente se había alzado con el Torneo Argentino de 1985/86 y, lo más importante, la Copa Libertadores de América de ese año, venciendo en la final al América de Cali.

Aquel logro de 1986, con una formación que incluyó a figuras como Nery Pumpido; Jorge Gordillo, Nelson Gutiérrez, Oscar Ruggeri, Alejandro Montenegro; Héctor Enrique, Américo Gallego, Roque Alfaro, Norberto Alonso; Antonio Alzamendi y Juan Gilberto Funes, permanece en lo más alto de la historia junto a la gesta de la Copa Libertadores 2018.
Los sucesivos planteles no han podido repetir la gloria; River volvió a jugar la final mundial en otras dos oportunidades, cayendo 1-0 ante Juventus en 1996, en una final pólemica donde luego de nueve años se comprobó que los jugadores del equipo italiano habian consumido una sustancia ilegal para sacar ventaja deportiva. La última final del mundo que disputó el Millonario terminó en derrota por 3-0 frente al Barcelona de Lionel Messi en 2015.