14/12/2025 - Edición Nº1041

Política

Boinas blancas

El nuevo titular de la UCR reivindicó a Raúl Alfonsín y llamó al diálogo

14/12/2025 | El titular del partido centenario, Leonel Chiarella, destacó la figura del expresidente y planteó una estrategia basada en el consenso.



El nuevo presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), Leonel Chiarella, reivindicó la figura de Raúl Alfonsín como el máximo referente histórico del partido y delineó una propuesta política centrada en el diálogo, la gestión y la obra pública como pilares para recuperar el protagonismo del radicalismo en la escena nacional.

Al definir su identidad política, Chiarella sostuvo que “nuestro líder más importante fue Raúl Alfonsín”, a quien describió como un dirigente con coraje, vocación democrática y capacidad de consenso, que supo convocar a distintos sectores para consolidar la vida institucional del país tras el retorno de la democracia.

El titular del partido agradeció el respaldo de los delegados partidarios y de los gobernadores radicales que lo acompañaron en su elección, y remarcó que la UCR gobierna actualmente cinco provincias y cuenta con más de 500 intendentes en todo el país. En ese sentido, destacó que esa presencia territorial le permite al radicalismo exhibir una experiencia concreta de gobierno y acercar propuestas reales a la sociedad.

En relación con el Gobierno Nacional, Chiarella afirmó que el partido mantendrá una postura de madurez política, con disposición a acompañar aquellas medidas que considere positivas y a marcar diferencias cuando sea necesario. Subrayó que esa actitud estará guiada por una mirada federal que contemple las realidades y necesidades de las provincias.

Asimismo, sostuvo que el radicalismo no busca “volver atrás” y consideró que el kirchnerismo es un ciclo político agotado. En contraposición, planteó que la UCR aspira a contribuir a la construcción de la Argentina desde el sentido común, el diálogo y el consenso democrático.

Entre sus principales críticas al Ejecutivo, Chiarella advirtió sobre la falta de inversión en infraestructura y sostuvo que no existe desarrollo posible sin obra pública. En ese marco, alertó por el deterioro de rutas estratégicas para el transporte de la producción y señaló que el superávit fiscal “por sí solo no sirve” si no se traduce en mejoras concretas para la vida cotidiana de la población.

Sobre la situación interna del partido, reconoció las dificultades electorales y la fragmentación en el Congreso, y aseguró que la reconstrucción del radicalismo requerirá diálogo, madurez política y trabajo conjunto entre gobernadores, legisladores, intendentes y las distintas organizaciones partidarias.

De cara al futuro, afirmó que la UCR debe fortalecerse como partido y, al mismo tiempo, evaluar alianzas que contribuyan al desarrollo del país, aunque evitó definir posibles socios y remarcó que ese debate deberá darse de manera colectiva dentro del espacio.

GZ