Australia en duelo
17/12/2025 - Edición Nº1044
Internacionales
Atentado armado
Bondi Beach: padre e hijo matan a 16 personas y desatan revisión de armas
15/12/2025 | El ataque en Sídney detonó cambios legales y una investigación que aún analiza vínculos y motivos
Australia atraviesa uno de los momentos más dolorosos de su historia reciente tras el ataque armado ocurrido en Bondi Beach, donde un padre y su hijo abrieron fuego contra una multitud que participaba de una actividad por Hanukkah, en plena tarde de verano. La cifra de fallecidos llegó a dieciséis personas, mientras que más de cuarenta continúan internadas, entre ellas dos agentes que permanecen en estado grave pero estable.
El episodio golpeó con especial fuerza por su magnitud: se trata del peor tiroteo masivo en el país en casi tres décadas, desde la tragedia de Port Arthur en 1996.
Quiénes son los atacantes y qué se sabe de ellos
Las autoridades confirmaron que los responsables son un hombre de 50 años, que murió durante el enfrentamiento con la policía, y su hijo de 24 años, que fue trasladado con heridas críticas. Ambos vivían en Nueva Gales del Sur. El padre tenía licencia de armas desde 2015 y figuraba con seis armas registradas, lo que generó cuestionamientos sobre los controles vigentes.
Si bien uno de ellos constaba en archivos de seguridad, no había sido considerado un riesgo inmediato. La investigación intenta reconstruir su actividad reciente, su proceso de radicalización y el origen exacto del armamento utilizado, que incluía un rifle de cerrojo y una escopeta. En el vehículo familiar, agentes encontraron dos banderas vinculadas al Estado Islámico, un elemento que encendió nuevas alertas sobre posibles influencias extremistas.
Una escena de pánico en un evento familiar
El ataque duró alrededor de diez minutos y se desató ante la presencia de cerca de mil personas que participaban de un festejo religioso. Testigos describieron una estampida repentina por la arena y por las calles cercanas, en medio de gritos, teléfonos abandonados y familias dispersas buscando refugio.
Entre quienes intervinieron se destacó Ahmed al Ahmed, un transeúnte que logró derribar y desarmar a uno de los tiradores antes de recibir dos disparos. Su acción, filmada por asistentes, fue considerada decisiva para evitar un número aún mayor de víctimas. Tras ser operado, una campaña de apoyo recaudó más de un millón de dólares australianos.
Reacción oficial e inicio de reformas
El primer ministro Anthony Albanese calificó el atentado como un acto de odio religioso y terrorismo, y aseguró que el país emprenderá una revisión integral de su legislación. El Gobierno trabaja en un paquete de medidas que incluye:
-
Durabilidad limitada de las licencias.
-
Reducción de la cantidad de armas permitidas por persona.
-
Mayores restricciones a tipos de armas y modificaciones.
-
Un registro nacional actualizado en tiempo real.
-
Permisos exclusivos para ciudadanos australianos.
“Las circunstancias cambian, y también debe cambiar el nivel de control”, argumentó el mandatario, al visitar el memorial improvisado en el pabellón de Bondi, donde vecinos dejaron flores junto a banderas israelíes y australianas.
Mapa de Bondi Beach mostrando la zona exacta del tiroteo y el recorrido de la evacuación durante la emergencia.
Duelos, homenajes y apoyo comunitario
La playa, usualmente colmada de surfistas, corredores y turistas, amaneció desierta. Vecinos describieron un “silencio extraño”, solo interrumpido por patrullas policiales y equipos de seguridad comunitaria. A su vez, las organizaciones locales pusieron en marcha asistencia emocional para familias, sobrevivientes y testigos.
Líderes de la comunidad judía hablaron de un golpe “devastador”, con familias enteras afectadas y víctimas de entre 10 y 87 años. Uno de ellos, el rabino Mendel Kastel, recordó que se trata de una comunidad con larga presencia en la zona, donde vive cerca de un tercio de la población judía de Australia.
Vecinos y visitantes dejaron flores y encendieron velas en un homenaje silencioso para recordar a las víctimas del ataque.
Repercusiones internacionales y tensión diplomática
Gobiernos de todo el mundo condenaron lo ocurrido y enviaron mensajes de solidaridad. La secuencia reavivó discusiones geopolíticas: el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu acusó a Canberra de adoptar posturas que, según él, alimentan el antisemitismo; mientras que Australia recordó incidentes previos atribuidos a actores extranjeros, incluida la expulsión de diplomáticos iraníes en 2024 por ataques vinculados a objetivos judíos.
Los especialistas advierten que el atentado se suma a una serie de episodios antisemitas registrados desde 2023, aunque ninguno de la escala vivida en Bondi.
La investigación continúa
El comisario de Nueva Gales del Sur aseguró que se están examinando los antecedentes digitales, contactos y viajes de los agresores. Todavía no se descarta si actuaron completamente solos o si tuvieron apoyo indirecto.
Con la playa convertida en lugar de duelo y el país aún en shock, las autoridades piden cautela mientras avanzan peritajes, entrevistas y análisis balísticos. Lo único claro es que Australia enfrenta un desafío inédito en décadas: reforzar su seguridad sin perder el carácter abierto y multicultural que define a Sídney.
