19/12/2025 - Edición Nº1046

Sociedad


Cetáceo casi desconocido

San Clemente del Tuyú: murió el zifio varado pese al intenso operativo rescate de Mundo Marino

18/12/2025 | Una de las especies de cetáceos más raras y menos conocidas del mundo, fue asistido durante varias horas por especialistas de Fundación Mundo Marino. Aunque logró volver al mar, el animal fue hallado sin vida al día siguiente.



Durante la noche del 16 de diciembre, el equipo de rescate de la Fundación Mundo Marino recibió un llamado para asistir ante el varamiento de un inusual cetáceo en una playa céntrica de San Clemente del Tuyú. El animal fue identificado como un zifio, un tipo de cetáceo de mar abierto que no suele acercarse a la costa, cuya aparición en playas es muy poco frecuente y que es considerado el cetáceo menos conocido del mundo. Se trata de una especie emparentada con los delfines, pero con hábitos y características muy diferentes.

El aviso se recibió alrededor de las 19:30. Al momento del llamado, los integrantes del equipo de rescate se encontraban fuera de servicio, en sus domicilios, y se activó de inmediato el protocolo de respuesta. El equipo se organizó en dos grupos: uno se dirigió al lugar del varamiento para realizar la primera evaluación del animal, mientras que otro se trasladó al Centro de Rescate para preparar y retirar el equipamiento necesario. Al llegar al lugar, comenzó un intenso operativo de asistencia, que resultó particularmente exigente debido a la baja visibilidad y el hecho de tratarse de un animal macho, juvenil, de 4,32 metros de longitud y un peso estimado de una tonelada. Por este motivo, ​ las maniobras de rescate implicaron un esfuerzo físico sostenido y coordinado, con la participación de varios especialistas abocados a la asistencia.
 
Durante varias horas, se realizaron reflotamientos, procurando mantener al animal en una profundidad corta que le permitiera salir de manera autónoma. En cada intento, el zifio lograba pasar la rompiente y nadar hacia el mar, pero luego regresaba a la costa con un patrón de natación circular, un comportamiento que suele observarse en cetáceos que atraviesan cuadros graves asociados a varamientos.

El animal salía varias veces hacia el mar, pero al pasar la rompiente volvía de manera sistemática. Ese comportamiento nos indicaba que el cuadro era delicado. Aun así, seguimos intentando ayudarlo, sosteniéndolo, reflotándolo y dándole tiempo para que pudiera recuperarse y salir nadando por sus propios medios”, explicó Sergio Rodríguez Heredia, responsable del Centro de Rescate de Fundación Mundo Marino.
 
El operativo continuó hasta entrada la noche con la premisa de darle al animal todas las oportunidades posibles. Se lo asistió para despegarlo del fondo, aliviar el agotamiento muscular y favorecer su recuperación. Cerca de las 21:00, ya con visibilidad prácticamente nula, el zifio logró alejarse mar adentro y se lo perdió de vista. Por razones de seguridad, no fue posible continuar el operativo sin luz natural.

Desafortunadamente, en la mañana de hoy, durante una recorrida de monitoreo temprana por la zona, el cuerpo del animal fue hallado sin vida, varado en cercanías del lugar donde había sido asistido por última vez.  “Es una pena que el animal no haya logrado sobrevivir, pero estamos conformes con el trabajo realizado durante toda la noche anterior. Cada individuo importa, y el hecho de intentar o no puede marcar la diferencia para que un animal tenga una segunda oportunidad. Sabemos que la muerte forma parte del ciclo natural, pero siempre vamos a estar presentes cuando exista la posibilidad de ayudar”, señaló Rodríguez Heredia. 

“Los varamientos de zifios vivos en la costa argentina son extremadamente raros y se registran con mayor frecuencia en el sur del país. Desde la creación de Fundación Mundo Marino en 1987, hemos registrado solamente cuatro casos de zifios varados”, indicó Juan Pablo Loureiro, médico veterinario de la Fundación.

El cuerpo del animal fue trasladado al Centro de Rescate, donde se realizó la necropsia correspondiente y la toma de muestras, que fueron enviadas a distintos laboratorios de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata. Los resultados preliminares de la necropsia indican que el animal presentaba un cuadro de neumonía y una alta carga parasitaria a nivel gastrointestinal, y todo apunta a que esta condición previa fue determinante para su muerte.

La muerte de Kshamenk

Este hecho se conoció pocos después de informarse la muerte de Kshamenk, la única orca que permanecía en cautiverio en toda Sudamérica. Desde 1992, vivía en una pileta de poco menos de 30 metros en el Mundo Marino de San Clemente del Tuyú. Según informaron desde el oceanario, la muerte ocurrió cerca de las 7 de la mañana a causa de un paro cardiorrespiratorio.

“Con inmenso dolor queremos comunicar que hoy, rodeado de sus cuidadores y del equipo veterinario, Kshamenk nos dejó. Actualmente, se están analizando las circunstancias y el origen que lo provocó“, indicaron.

La historia de Kshamenk se remonta a febrero de 1992, cuando un alerta llegó a los rescatistas de Mundo Marino. El aviso, realizado por vecinos de la zona, aseguraba que habían varado cuatro animales en la Ría de Ajó que desemboca en la Bahía de Samborombón.