La desocupación bajó al 6,6%, pero subió la informalidad

De acuerdo con los datos oficiales difundidos este martes por el INDEC sobre el mercado de trabajo, la tasa de desocupación se ubicó en 6,6% en el tercer trimestre del año.

El dato implica una baja de 0,3 puntos porcentuales frente al mismo período de 2024, aunque se mantiene 0,9 p.p. por encima del nivel registrado en el tercer trimestre de 2023.

Al observar el comportamiento por género en la población de 14 años y más, la desocupación fue más elevada entre las mujeres, con una tasa de 7,4%, mientras que entre los varones se ubicó en 5,9%.

En términos regionales, las mayores tasas de desocupación se registraron en la región Pampeana (7,5%) y el Gran Buenos Aires (6,8%). En contraste, las regiones con menor nivel de desempleo fueron la Patagonia (5,0%) y el Noroeste (4,7%).

Más allá del dato puntual de desocupación, otros indicadores permiten dimensionar con mayor precisión el estado del mercado laboral: 

Por un lado, los ocupados demandantes de empleo -personas que trabajan, pero buscan un segundo empleo o más horas- descendieron del 17,6% en el tercer trimestre de 2024 al 16,1% en igual período de este año.

En la misma línea, los subocupados demandantes de empleo también mostraron una baja, al pasar de 8,1% a 7,3%.

Como resultado, la presión sobre el mercado de trabajo —que incluye a desocupados, subocupados, ocupados demandantes y ocupados no demandantes disponibles— alcanzó el 28,7% de la Población Económicamente Activa (PEA).

Más informalidad y precarización

Uno de los datos más preocupantes del informe es el avance de la informalidad. En el tercer trimestre, la proporción de trabajadores informales aumentó del 42,6% al 43,3% interanual, lo que implica unos 201.000 nuevos trabajadores informales.

1. La desocupación en el tercer trimestre se ubicó en el 6,6%, por debajo del 6,9% de un año atrás (INDEC - EPH). Sería una buena noticia si no mirásemos las razones: un fuerte crecimiento de la ocupación informal, principalmente por cuenta propia. Hilo

— Luis Campos (@luiscampos76) December 18, 2025

Al analizar la calidad del empleo entre los asalariados, se observa que la proporción de trabajadores con descuento jubilatorio se redujo levemente, del 20,8% al 20,7%, y se mantiene 1,1 p.p. por debajo del nivel de 2023.

En sentido contrario, creció el peso de los cuentapropistas, en gran parte monotributistas, que pasaron del 10,3% al 10,6%.

Si bien la tasa de desocupación se mantiene en niveles inferiores a los registrados en 2018, 2019 e incluso en 2021 y 2022, esto responde en buena medida a que la pérdida de empleo formal fue compensada por el crecimiento del monotributo y de trabajos informales o changas, que funcionan como un amortiguador y evitan que el desempleo vuelva a ubicarse en dos dígitos.

De todos modos, a la luz de los datos adelantados del SIPA, la falta de empleo formal aparece como uno de los principales problemas del mercado laboral actual, junto con la debilidad de los salarios, que sigue condicionando la recuperación del poder de compra de los trabajadores.