El nombre de Christian Petersen volvió a ocupar la agenda en las últimas horas a raíz de su delicado cuadro de salud. El reconocido chef permanece internado en el Hospital Ramón Carrillo de San Martín de los Andes, mientras crece la incertidumbre en torno a su evolución, ya que su familia decidió no brindar detalles públicos sobre su estado.
En medio del hermetismo, quienes sí rompieron el silencio fueron los guías que acompañaron a Petersen durante la excursión al volcán Lanín, donde se produjo el episodio que derivó en su internación. A través de un comunicado, aportaron información clave sobre el comportamiento del cocinero antes y durante la travesía.
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Según explicaron, durante el control previo del equipamiento, Christian realizó pedidos particulares, entre ellos caminar en completo silencio. Esa condición llevó a que se resolviera que hiciera la actividad de manera individual, aunque siempre acompañado por un guía y bajo supervisión constante.
Los guías también detallaron que, cerca de la medianoche, el chef comenzó a mostrar actitudes que llamaron la atención del grupo. Frente al malestar del resto de los excursionistas, se decidió iniciar el descenso. En ese contexto, aclararon un punto central ante versiones que circularon en distintos medios: aseguraron que Petersen bajó en buenas condiciones generales y que no presentaba síntomas compatibles con arritmia ni con un accidente cerebrovascular.
Días atrás, el Ministerio de Salud de Neuquén confirmó que el chef se encontraba internado en terapia intensiva con un cuadro de falla multiorgánica. En el parte médico oficial se indicó que su estado es reservado y que requiere atención médica especializada permanente. Además, se solicitó expresamente respeto por la intimidad del paciente y de su entorno familiar.
A la compleja situación se sumaron declaraciones televisivas. Fernanda Iglesias aseguró que Petersen habría dado positivo de cocaína y MD (metanfetaminas), al tiempo que remarcó el fuerte hermetismo que mantiene la familia. Según su relato, tras ser apartado del grupo y quedar bajo la supervisión de un guía, el chef llegó al refugio sin inconvenientes, pero luego comenzaron los conflictos.
Siempre de acuerdo a esa versión, Petersen no pudo continuar con la excursión, se dio aviso al guardaparque y a la Gendarmería, y debido a su estado de alteración debió ser sedado. Ya medicado, fue trasladado primero al hospital de Junín de los Andes y posteriormente derivado a San Martín de los Andes, donde permanece internado.
Para recuperación de adicciones Llamá al 141.