Perón, Onganía, Alfonsín y Menem como Papá Noel: las geniales caricaturas de Landrú

Las caricaturas de presidentes argentinos vestidos como Papá Noel, realizadas por el histórico humorista gráfico Landrú, volvieron a circular con fuerza en los últimos días a partir de una serie de publicaciones difundidas por la Fundación Landrú.

 Los dibujos, cargados de ironía política y aguda lectura del poder, retratan a distintos mandatarios repartiendo -o cargando- regalos que, lejos de ser inocentes, condensan los dilemas, tensiones y protagonistas de cada época.

Las ilustraciones, publicadas originalmente en medios gráficos durante distintas décadas del siglo XX, funcionan hoy como una radiografía del clima político de cada gobierno y como una muestra del rol central que tuvo el humor político en la vida pública argentina.

Quién fue Landrú, el maestro del humor político

Juan Carlos Colombres, más conocido como Landrú, fue uno de los caricaturistas y humoristas gráficos más influyentes de la Argentina.

Fundador de la revista Tía Vicenta, supo construir un estilo inconfundible: dibujos de trazo simple, personajes hieráticos y textos breves pero demoledores. Su humor, lejos del chiste fácil, se apoyaba en la observación fina del poder y en una ironía que incomodaba tanto a gobiernos democráticos como a dictaduras.

Landrú atravesó décadas clave de la política argentina y dejó un archivo visual que hoy es considerado patrimonio cultural. La Fundación que lleva su nombre se encarga de preservar y difundir ese legado.

Perón, Illia y la Navidad como escena política

Entre las caricaturas rescatadas aparecen representaciones de Juan Domingo Perón y Arturo Illia caracterizados como Papá Noel.

En ambos casos, Landrú apeló a la simbología navideña para reflejar la relación entre el poder y las expectativas sociales: el líder que promete, el presidente que reparte, y la ciudadanía que espera.

En el caso de Illia, la imagen dialoga con la percepción de un gobierno austero y bienintencionado, mientras que en Perón el gesto remite a su centralidad política y a su vínculo directo con las masas.

Onganía y la bolsa de los problemas

Una de las caricaturas más elocuentes es la de Juan Carlos Onganía, donde el presidente de facto aparece vestido de Papá Noel cargando una bolsa que no contiene regalos, sino problemas. En ella se leen claramente rótulos como importaciones, inflación, nuevas tarifas, presupuesto y el Gran Acuerdo Nacional.

El dibujo sintetiza la mirada crítica de Landrú sobre un gobierno militar que prometía orden y estabilidad, pero acumulaba tensiones económicas y políticas que terminarían erosionando su proyecto.

Lanusse y la transición bajo el árbol

También fue retratado Alejandro Agustín Lanusse, otro de los presidentes de facto de la llamada Revolución Argentina. Su caricatura como Papá Noel remite al contexto de transición política, con un país que se encaminaba, no sin conflictos, hacia la salida electoral y el retorno del peronismo.

La Navidad, en este caso, funciona como metáfora de una espera cargada de incertidumbre.

Alfonsín y los regalos de la democracia

En la caricatura dedicada a Raúl Alfonsín, Landrú despliega una escena poblada de destinatarios. El presidente democrático aparece repartiendo “regalitos” a figuras centrales de la época: Bernardo Grinspun, Álvaro Alsogaray, Federico Storani, Herminio Iglesias y Dante Caputo, entre otros.

La imagen refleja el complejo entramado político del inicio de la democracia, con negociaciones, tensiones entre oficialismo y oposición, y el desafío de gobernar en un contexto económico adverso, pero con una fuerte carga simbólica de esperanza institucional.

Menem y los obsequios del poder

Por último, las caricaturas de Carlos Menem muestran a un Papá Noel con regalos destinados a referentes clave del arco político y económico de los años noventa. Entre los nombres que aparecen figuran Fernando de la Rúa, Graciela Fernández Meijide, Roque Fernández y María Julia Alsogaray.