26/12/2025 - Edición Nº1053

Internacionales

Reconocimiento externo

Líderes de América y Europa felicitan a Nasry Asfura y hablan de cambio político en Honduras

25/12/2025 | Estados Unidos, líderes regionales y referentes conservadores avalan el cambio político tras la derrota del zelayismo.



La proclamación de Nasry “Tito” Asfura como presidente electo de Honduras fue seguida por una rápida ola de reconocimientos internacionales que refuerzan la legitimidad del proceso electoral y anticipan un reordenamiento diplomático en Centroamérica. Mensajes de apoyo provenientes de Estados Unidos, América Latina y Europa subrayan la lectura de un cambio político significativo tras la salida de la izquierda y del entorno de la familia Zelaya del poder.

Uno de los respaldos más relevantes llegó desde Washington. El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, destacó que “el pueblo de Honduras ha hablado” y expresó la disposición de su país a trabajar con la nueva administración para impulsar la prosperidad y la seguridad en el hemisferio. El pronunciamiento consolida a Asfura como un interlocutor válido para la principal potencia regional.

Honduras 


Honduras es un país centroamericano con costas del Mar Caribe al norte y el Océano Pacífico al sur.

Señales desde la región

En América Latina, el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, felicitó públicamente al mandatario electo y manifestó su interés en cooperar en beneficio de ambos países y de la región. Desde Argentina, Javier Milei celebró el resultado como una victoria de la libertad y un freno al avance del populismo, reforzando la narrativa de un giro ideológico en Centroamérica.

Estas expresiones reflejan una convergencia política entre gobiernos que ven en el triunfo de Asfura una oportunidad para fortalecer la cooperación regional en materia de seguridad, migración y crecimiento económico, áreas clave para la estabilidad del istmo centroamericano.

Fin de un ciclo político

El respaldo internacional también fue celebrado por dirigentes conservadores europeos, como Santiago Abascal, quienes interpretan la elección como el cierre de una etapa marcada por la influencia de la familia Zelaya y sus alianzas con gobiernos de izquierda de la región. Para este sector, la derrota del zelayismo representa una reafirmación democrática frente a proyectos ideológicos considerados autoritarios.

Con el reconocimiento externo en marcha, Honduras se encamina hacia una transición respaldada por actores clave del sistema internacional. Para el nuevo gobierno, este apoyo inicial constituye un capital político relevante que puede facilitar inversiones, cooperación en seguridad y una reinserción internacional más pragmática tras años de polarización interna.