27/12/2025 - Edición Nº1054

Sociedad


Salud bucal

La Facultad de Odontología de la UBA abrirá en verano con atención de alta complejidad y precios congelados

27/12/2025 | Ante la crisis del sistema médico-odontológico, el hospital escuela mantendrá sus servicios durante enero y febrero. Con 300 equipos disponibles y más de 500 profesionales, se realizarán desde arreglos básicos hasta implantes sin necesidad de turno previo.



En una medida clave para garantizar el acceso a la salud en un contexto económico complejo, la Facultad de Odontología de la Universidad de Buenos Aires (FOUBA) confirmó que mantendrá su hospital abierto durante todo el receso de verano. La iniciativa busca absorber la creciente demanda de pacientes que han quedado fuera del sistema de coberturas privadas y evitar el habitual colapso de turnos en el mes de marzo.

A diferencia de otros años, el hospital no solo atenderá urgencias, sino que permitirá la continuidad y el inicio de tratamientos de baja, mediana y alta complejidad.

Atención total: 300 equipos y 500 profesionales

A partir del lunes 5 de enero, la Facultad pondrá en marcha un operativo que funcionará en tres turnos (mañana, tarde y noche). Un cuerpo de más de 500 docentes y profesionales estará a cargo de la atención simultánea en 300 sillones odontológicos, asegurando una capacidad de respuesta masiva.

Entre los servicios disponibles se destacan:

Tratamientos básicos: arreglo de caries y extracciones.

Alta complejidad: tratamientos de conducto, colocación de coronas, prótesis e implantes.

Una de las novedades más importantes para los pacientes es que los aranceles se mantendrán en los mismos valores de enero de 2025. Esta decisión de la UBA apunta directamente a mitigar los efectos de la crisis inflacionaria en los insumos odontológicos, facilitando la accesibilidad económica.

Modalidad de atención

Según informaron las autoridades de la casa de Altos Estudios, la atención será sin turno previo, en tanto que el ingreso será exclusivamente por guardia. Alli se evaluará el caso y se derivará a una de las cinco clínicas específicas que estarán operativas durante el verano.

Esta apertura excepcional durante enero y febrero responde a la crisis estructural que atraviesa la odontología en Argentina, donde muchos profesionales han dejado de atender por obras sociales debido a los bajos honorarios. Al mantener la actividad, la UBA busca garantizar la continuidad pedagógica y clínica, evitando que los tratamientos se interrumpan durante dos meses y generen un cuello de botella al inicio del ciclo lectivo.