El embajador argentino en España habló sobre las internas dentro de la coalición opositora y opinó sobre el rol del radicalismo.
Ricardo Alfonsín, embajador argentino en España, declaró este sábado que la Unión Cívica Radical (UCR) “tiene que salir” de la coalición Juntos por el Cambio (JxC), ya que “es muy difícil hacer radicalismo en serio con el PRO” y afirmó que la alianza opositora “es un frente contra natura porque reúne fuerzas que piensan distinto”.
“Con todo el respeto hacia el PRO, creo que el partido radical tiene que salir de Juntos por el Cambio porque es muy difícil hacer radicalismo en serio con el PRO. No nos engañemos, radicales. Es muy difícil hacer radicalismo con el PRO y yo fui uno de los que pensé que se podía hacer, aunque nunca creí en esta alianza de Cambiemos”, manifestó el diplomático en diálogo con Radio 10.
“La alianza se rompe si cada uno de los partidos que integran Cambiemos se empiezan a manifestar con sinceridad sobre lo que piensan de lo que hay que hacer en el país. Es muy difícil que subsista este acuerdo”, apuntó Alfonsín.
Además agregó: “ese acuerdo de Juntos por el Cambio es un frente contra natura en la medida que reúne fuerzas que piensan distinto”, “el Radicalismo está nominalmente en Juntos por el Cambio porque desde el punto de vista ideológico no es el radicalismo el que está en JxC. Es otra cosa que se llama radicalismo, pero que representa a otra cosa a la que históricamente representamos nosotros. Es muy diferente”.
En contra de los cánticos de un grupo de jóvenes de Franja Morada contra el kirchnerismo, Alfonsín, se sinceró: “Es un horror. Eso de radicalismo no tiene nada porque nosotros antes cantábamos ‘Somos la vida, somos la paz’” y agregó: “Eso no es política, no es republicano ni democrático. Espero que en el partido los adviertan a esos chicos”.
“Creo que muchos de esos chicos ni saben porque están en el radicalismo y quizás los reúne un sentimiento por la negativa y la bronca con el oficialismo”, enfatizó.
Por otro lado, Alfonsín, sostuvo: “la política es diálogo y no violencia. Por eso, con el odio no se puede nunca generar política. En la Argentina, la polarización es emocional y no ideológica, ya que algunos establecen con el adversario político una relación de amigo-enemigo”.
Para cerrar, el ex legislador radical aseveró que “el que crea que con odio se puede resolver mejor las cosas que con una actitud civilizada, que cambie y reflexione”.