Una mujer fotografió la estructura que se derrumbó 15 minutos antes de la tragedia cuando vio que un sector de los andamios se estaba doblando y se lo veía inclinado.

Conforme va avanzando la investigación por la tragedia en Ezeiza que dejó un trabajador muerto hace unas semanas, empiezan a aparecer más pruebas de las presiones que existían sobre los trabajadores de la obra para que Macri pudiera inaugurarla como parte de su campaña electoral. El apuro habría generado que se juntara un peso excesivo en la estructura de andamios, y esto terminó con la vida del capataz José Bulacio de la constructora TANE S.R.L.

El juez federal Federico Villena se encuentra realizando la investigación por la muerte de Bulacio, y en este marco fue encontrada una factura a la constructora en concepto de aceleramiento de la construcción de un sector de la nueva terminal. De acuerdo con varios testigos, la cantidad de materiales y personas que se encontraban sobre los andamios habría sido la causa del derrumbe donde también quedaron otros 13 trabajadores heridos. Pero en las últimas horas apareció una testigo clave.

Se trata de una empleada que se encontraba trabajando en una de las empresas contratistas en la zona, que sacó una fotografía al andamio unos minutos antes de su derrumbe porque lo vio inclinado. Después de comentárselo a otra mujer de Seguridad e Higiene, esta última habría alertado a Bulacio sobre la situación y él habría subido, según los testimonios que estaban en el lugar, para alertar a los obreros. En ese momento, había 6 personas arriba del andamio pasándose materiales, lo que provocó una sobrecarga de peso. Las torres, además, no estaban aseguradas a un punto fijo.

Según declararon varios testigos que se encontraban trabajando en la obra, el apuro se debía a la intención del presidente Mauricio Macri de realizar una inauguración parcial de la nueva terminal como parte de la estrategia para su campaña electoral.