El exministro de Salud reveló que están “trabajando desde el área de la salud para ver cómo damos un paso más para organizar este sistema sanitario que tenemos en Argentina”

El exministro de Salud bonaerense y candidato a diputado nacional peronista Daniel Gollan se pronunció por un plan que “ponga coto a los llamados medicamentos de alto precio que están desfinanciando los sistemas del mundo”, en el marco de la “redefinición de un modelo de financiamiento y de atención” en materia sanitaria.

Gollan presentó junto al ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, el libro “La salud tiene precio”, del cual ambos son compiladores, en el Centro Cultural Kirchner (CCK), donde hubo una mesa de debate acerca de las principales propuestas de reformas del actual sistema sanitario y las enseñanzas que está dejando la pandemia de coronavirus.

“Durante la pandemia la población tuvo que poner en un primer plano lo que era la salud porque dependíamos de resolver un problema sanitario para volver a nuestra vida normal. Eso potenció mucho la necesidad de sanitaristas y compañeros y compañeras que venimos trabajando desde el área de la salud para ver cómo damos un paso más para organizar este sistema sanitario que tenemos en Argentina”, dijo Gollan.

En cuanto a las líneas que se propone modificar, el candidato a diputado nacional bonaerense del Frente de Todos aseguró que hay que pensar “cómo redefinimos un modelo de financiamiento y un modelo de atención que evidentemente se puede mejorar mucho”.

“El modelo de atención tiene que ser más racional”

“Se puede articular mejor, se puede negociar mejor si compramos medicamentos entre todos y se pueden negociar mejores precios si tenemos una ley que ponga coto a los llamados medicamentos de altos precios que están desfinanciando los sistemas del mundo” y “si el modelo de atención es más racional”, enfatizó.

Luego citó un ejemplo de negociación colectiva de cuando era ministro de Salud de la Nación del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en 2015 y se tramitó a nivel regional la compra de medicamentos para el sida a un valor 22 veces menor al que se compraba hasta ese momento.

Se preguntó: “Si lo pudimos hacer a nivel regional ¿por qué no lo podemos hacer acá?”.

Para Gollan, el libro presentado ayer forma parte de un grupo de textos que trata de ver cómo impactó la pandemia y “como pensamos un sistema sanitario a futuro en base a esa experiencia”.

“La pandemia desnudó muchos problemas, aprendimos a trabajar más en equipo dentro del sector de la salud, por lo tanto hay condiciones para ir por más. Hay que modificar realidades y muchas veces afectar intereses. De lo que se trata es de buscar los mayores consensos necesarios para que los intereses que se afectan sean los minoritarios en pos de mejorar la salud de toda la población”, expresó.

Por su parte, Kreplak sostuvo que “hay que reformar el sistema de salud y ese sistema tiene un costo” que hay que revisar, pero también hizo hincapié en el “para qué”.

Para el funcionario provincial, “logramos con la pandemia tener una atención” en salud que “no discriminó si eras rico o pobre”; que brindó un “acceso igualitario”, e inclusive destacó que se realizó “investigación desde el sector público” porque “el Estado se hizo cargo”.

También mencionó en su exposición la historia del surgimiento del libro porque “queríamos estudiar la macroeconomía de la salud y no había donde estudiar eso” y por eso se lo propusieron al gobernador de la provincia, Axel Kicillof (quien también escribió un capítulo del libro), para “armar esta aventura” que se materializó en una diplomatura dictada junto a la Universidad de José C. Paz en la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo durante el gobierno de Mauricio Macri.

Las clases se estructuraron como capítulos del libro que luego de iniciada la pandemia incorporó textos sobre ella.

El tercer expositor y también compilador del libro fue el jefe de asesores del Ministerio de Salud provincial, el sanitarista brasileño Enio García, quien aseveró que el “horizonte” al que se debe apuntar cuando se habla de una reforma del sistema de salud “es que todos tengamos el acceso a un piso digno” y “que no haya un privilegios, como mostró la campaña de vacunación”, donde, dijo, “hubo un criterio sanitario”.

“Que haya un acceso universal y que además ese acceso esté definido por una necesidad”, dijo, y para eso se deben “generar consensos mínimos con los actores”.