El comunicado busca llevar tranquilidad a los sectores de la clase media

Las entidades financieras de todo tipo -nacionales, extranjeras y públicas- dejaron trascender que todos sus clientes tienen a su disposición los dólares que cada persona o empresa tiene depositados en las sucursales bancarias para -si así lo desean- retirarlos por caja, llevarlos a una caja de seguridad o transferirlos al exterior, sin ningún tipo de restricción.

Es más, algunas entidades ya dispusieron extender los horarios de atención al público para que ningún cliente se tenga que retirar de la sucursal sin haber podido realizar el correspondiente trámite.

“Vamos a mostrarles los dólares para llevarles tranquilidad a todos los clientes” dijo un banquero a este diario. La extensión del horario ya se vio el jueves pasado y el viernes: en muchos bancos -sobre todo en sus casas matrices- se atendió a clientes hasta cerca de las 8 de la noche. La extensión del horario no se puede aplicar en el sentido de abrir antes las sucursales, porque los tesoros están programados para abrirse a las 10 de la mañana.

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Desde el lunes 12 de agosto, se produjo una caída de depósitos que ya debe superar los 5.000 millones de dólares, desde los 35.000 que se registraban al viernes previo a las PASO.

El retiro de dólares -o su transferencia a cuentas en el exterior- se aceleró a partir de la disparada del tipo de cambio y los crecientes temores a que se imponga algún tipo de restricción para que el público pueda acceder a sus dólares.

Algunas entidades registraron casos especiales de demoras, pero en sucursales. Lo habitual, en esos casos, es pedirle al cliente que deje un pedido por escrito, con la suma que desea retirar, y se le dice que vuelva en 24 horas. O se da aviso a otra sucursal para que el cliente se dirija, el mismo día, hacia la sucursal que tiene en ese momento liquidez suficiente.


En verdad, los bancos tienen liquidez de sobra. Los dólares de los depósitos solo se pueden prestar a empresas vinculadas al comercio exterior, es decir que generan dólares propios.