Luego de la manifestación del lunes, Alberto Fernández, despidió a Puenzo, titular del INCAA, que se negaba a renunciar.
Luego de la manifestación del último lunes, el presidente Alberto Fernández echó por decreto a Luis Puenzo, titular del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA). El cineasta no había llegado a un acuerdo con el ministro de Cultura y se negaba a renunciar.
“Dispónese el cese del señor Luis Adalberto Puenzo en el cargo de Presidente del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), ente público no estatal en el ámbito del Ministerio de Cultura” manifiesta el primer artículo del decreto presidencial. En el cargo, de forma interina, quedará Nicolás Battle, que se desempeñaba como vicepresidente.
El reclamo de los trabajadores del sector audiovisual
La manifestación de los trabajadores estaba relacionado al desfinanciamiento y la caducidad del Fondo de Fomento. La delegada general de la Junta Interna de ATE en el INCAA, Ingrid Urrutia, dijo al medio TN: “La cultura está atravesando una situación crítica, se exige la necesidad de que el Congreso y el Gobierno nacional tomen cartas en el asunto; que avancen en una solución por los fondos y para que el país no pierna nada de la soberanía cultural”.
En tanto, detalló que el ministro de Cultura, Tristán Bauer “convocó a los delegados que estaban presentes, escuchó los reclamos, se comprometió a hacer cambios y a no realizar ajustes en el sector”.
Urrutia agregó: “Se comprometió a empezar una nueva etapa, que implica el diálogo y la restitución del cogobierno que no se estaban cumpliendo, violando la propia ley del cine. Si nos eliminan los Fondos de Fomento plenamente, está en riesgo nuestro puesto de trabajo”.
En ese sentido, la directora y productora de cine, Virna Molina, expresó: “Cuando lo recaudado se redireccionaban a los organismos, les permitían planificar una política a largo plazo. Con esta ley, la independencia que tiene la cinematografía se tiñe de los colores políticos del momento y eso le hace mucho mal al cine”.
“Tenemos nuevas propuestas, estéticas, estamos ocupando lugares en muchos festivales del mundo y teniendo un público que crece, pero nos dejan afuera de todas las posibilidades de hacer cine. Estamos cansados porque no hacemos política, hacemos cine y me parece que hay que seguir estando porque evidentemente molesta”, enfatizó.
Y apuntó contra Puenzo: “Es muy triste que el presidente del organismo desconozca esta realidad nueva, que no le importe tu palabra, ni tu trayectoria, ni tu mirada sobre la realidad o lo que podés aportar. Además, nos llama la atención que cuando no era directivo e iba a las asambleas tenía un discurso y ahora de golpe cambió rotundamente. Construyó un discurso que es contradictorio con su obra y con cómo llegó al cine él”.