Hoy, Stanley y Dante Sica recibieron a la cúpula de la CGT y acordaron entregar a través del Ministerio de Desarrollo Social una tarjeta para la compra de alimentos a aquellos que fueron suspendidos o despedidos de sus puestos laborales en el último tiempo. El objetivo es descomprimir la situación social que produce la crisis económica.
Los representantes del Poder Ejecutivo descartaron declarar la emergencia alimentaria, pero el reclamo de los gremios fue recibido y se sumará al seguro de desempleo que cobran los desocupados. Todavía queda por definir la cantidad de beneficiarios que serán alcanzados y la manera en la que se implementará esta medida.