Cuando la afección afecta los ganglios linfáticos de la membrana que conecta el intestino con la pared abdominal (mesenterio), se la llama linfadenitis mesentérica.
Una infección intestinal viral es la causa habitual de la linfadenitis mesentérica, también conocida como adenitis mesentérica. Afecta principalmente a niños y adolescentes.
Esta dolorosa afección puede imitar la apendicitis o una afección en la cual una parte del intestino se mete adentro de otra parte del intestino (invaginación). A diferencia de la apendicitis o la invaginación intestinal, la linfadenitis mesentérica rara vez es grave y generalmente desaparece por sí sola.
La causa más común de linfadenitis mesentérica es una infección viral, como la gastroenteritis, a menudo llamada gripe estomacal. Esta infección causa inflamación en los ganglios linfáticos del tejido fino que une el intestino a la parte posterior de la pared abdominal (mesenterio). Otras causas de linfadenitis mesentérica incluyen infección bacteriana, enfermedad intestinal inflamatoria y linfoma.
Los casos leves y sin complicaciones de linfadenitis mesentérica y los causados por un virus generalmente desaparecen por sí solos, aunque la recuperación completa puede tomar cuatro semanas o más.
Para el tratamiento de la fiebre o el dolor, considera darle a tu hijo medicamentos de venta libre para la fiebre y el dolor para bebés o para niños como paracetamol o ibuprofeno como una alternativa más segura a la aspirina. Se pueden recetar antibióticos para una infección bacteriana de moderada a grave.
El dolor abdominal es común en niños y adolescentes, y puede ser difícil saber cuándo requiere atención médica.
Llama al médico de inmediato si tu hijo tiene episodios de:
Dolor abdominal intenso y repentino – Dolor abdominal con fiebre – Dolor abdominal con diarrea o vómitos
Además, llama al médico si tu hijo tiene episodios de los siguientes signos y síntomas que no mejoran en poco tiempo:
Dolor abdominal con un cambio en los hábitos intestinales – Dolor abdominal con pérdida de apetito – Dolor abdominal que interfiere en el sueño