Un bebé de cinco meses llegó muerto en los brazos de su abuela a una sala de primeros auxilios Rincón de Milberg, en el partido de Tigre. Los médicos que la recibieron intentaron reanimarlo practicándole maniobras de RCP pero no pudieron salvarlo.
Inmediatamente los médicos se dieron cuenta que el bebé tenía signos compatibles con un estrangulamiento, una fractura en la cabeza y varias lesiones en la cara, y dieron intervención a las autoridades. Por esta razón se abrió una investigación.
Según los peritos de la Delegación San Isidro de la Policía Científica se trató de un homicidio. La hipótesis indica que el bebé habría sido atacado a golpes y estrangulado en la casa donde vivía en el barrio denominado El Garrote, sobre la calle Almirante Brown al 100.
La causa está a cargo del fiscal Jorge Sebastián Fittipaldi de la Unidad Funcional del barrio El Rincón de Milberg, dependiente de los tribunales de San Isidro. También intervino en el hecho personal de la comisaría 1ª de Tigre.
