Se trata de la especie “San Pedro”, el procedimiento se llevó a cabo en cinco locales de Francisco Álvarez, Moreno y Merlo. 

Se hallaron 300 cactus de la especie “San Pedro”, que contiene componentes alucinógenos, y 30 plantas de marihuana en cinco viveros ubicados en Merlo y Moreno. El operativo se da en el marco de una causa en la que investiga la venta ilegal de “especies vegetales y hongos alucinógenos”.

El procedimiento lo llevó a cabo la Policía Federal (PFA) luego de la orden del juez federal de Morón, Jorge Rodríguez, por una investigación de una presunta infracción a la Ley de Drogas 23.737 y a la Ley N° 22.344.

Secuestran 300 cactus con componentes alucinógenos en comercios del Conurbano

Fuentes de la causa declararon al medio Télam que en los comercios se encontraron más de 300 cactus “San Pedro” y 30 plantas de marihuana listas para el consumo. Al menos cuatro personas fueron demoradas y quedaron notificadas de la formación de una causa en su contra.

“Los cactus estaban camuflados detrás de los invernáculos y en un lugar tapado con otro tipo de vegetación. Aquel que lo haya hecho, lo hacía con un propósito”, sostuvo una fuente policial ligada a la investigación. El precio de los cactus se comercializaban entre $2.500 y $30.000.

Secuestran 300 cactus con componentes alucinógenos en comercios del Conurbano

El cactus “San Pedro” tiene mescalinaun “alcaloide psicoactivo que se encuentra incluido en la lista de sustancias estupefacientes prohibidas por ley (anexo I del Decreto 560/19)”, por lo cual el fiscal Basso, en su pedido de allanamientos, consideró “que existen elementos suficientes para tener por acreditada la configuración” de un delito.

“Vale recordar que la mescalina está catalogada como un alucinógeno de origen vegetal, es decir, que forma parte de un grupo heterogéneo de sustancias que inducen estados alterados de conciencia, percepción, pensamiento y sensibilidad, acompañados de alucinaciones auditivas o visuales“, declaró el fiscal.

La investigación se inició en la fiscalía de Morón por una denuncia que llegó vía mail desde la Unidad Fiscal para la Investigación de Delitos contra el Medio Ambiente (UFIMA).

Fuentes policiales informaron que “este tipo de procedimientos no cuentan con precedentes” por lo que se “solicitó la colaboración de personal del Ministerio de Ambiente Y Desarrollo Sustentable de la Nación, a fin de contar con la presencia de biólogos e ingenieros forestales”.