La mamá de Chano solicitó al Senado una reforma en la Ley de Salud Mental.
Marina, la mamá de Chano Moreno Charpentier fue convocada ayer a participar de una Jornada de reflexión y debate al cumplirse 11 años de la sanción de la Ley de Salud Mental y Adicciones. “Creo que es la primera vez que escuchan a las madres. Vengo en representación de las madres. Las circunstancias hicieron que tenga voz. Muchas madres me han escrito y me han pedido que diga mi testimonio, en nombre de ellas y de todas las familias que luchamos contra esta enfermedad”, manifestó antes de entrar al Senado.
Al momento, Chano, se encuentra internado en la Clínica Avril siguiendo su tratamiento contra las adicciones. Fue trasladado hasta allí desde el Sanatorio Otamendi, a donde había ingresado hace una semana por un cuadro febril y una afección pulmonar.
“Estoy acá porque soy la mamá de alguien que está enfermo con la enfermedad de la adicción. Yo, lamentablemente todos saben lo que viví el año pasado, pero yo eso lo vivo hace 20 años. Mi hijo tiene 40 años y hace 20 años que sabemos que es adicto. Hace 20 años que damos esta batalla y que no tengo un sábado a la noche de paz, no puedo dormir con el teléfono apagado porque no sé qué va a pasar con mi hijo al día siguiente, porque no sé si cuando amanece va a estar vivo”, sostuvo la mamá de Chano.
“Una persona adicta tiene su voluntad tomada por la sustancia y no puede decidir con su sano juicio qué es lo bueno y lo malo para él”, dijo en relación a la actual Ley de Salud Mental y Adicciones.
Además, Marina Charpentier solicitó que se modifique la Ley Nacional de Salud Mental N° 26.657 e hizo énfasis en que debe ser reformulado el artículo 20, que indica que “la internación involuntaria de una persona debe concebirse como recurso terapéutico excepcional en caso de que no sean posibles los abordajes ambulatorios” y que “solo podrá realizarse cuando a criterio del equipo de salud mediare situación de riesgo cierto e inminente para sí o para terceros”.
“Yo no sé qué van a hacer con esta ley, pero el artículo 20 hay que cambiarlo. El supuesto equipo interdisciplinario lo tiene porque lo paga pero me pregunto qué sucede con el resto de las madres de adictos que no tienen esa posibilidad. Está lleno de madres que no tienen prepagas, que no tienen nada. Imagínense si a mí me hacen esto, que saben que puedo estar en los medios diciendo esto, qué les espera a las otras madres”, expresó Marina.
A su vez re refirió al episodio de Exaltación de la Cruz y pidió que los efectivos policiales necesiten una orden de allanamiento de un juez para poder intervenir en los casos de brotes psicóticos como el que atravesó su hijo en julio del año pasado cuando terminó herido de bala luego de un episodio en su casa de Exaltación de la Cruz. “¿Qué orden de allanamiento debo tener para salvarle la vida a mi hijo? Mi hijo consume solamente marihuana. El THS altera el funcionamiento del cerebro, hay ruido neuronal, genera alucinaciones, pánico”, dijo.
También relató que el lunes de la semana pasada fue el propio Chano quien le dijo que “no podía más” y arreglaron su internación en el Sanatorio Otamendi. Sin embargo, al día siguiente el músico alegó que se sentía mejor y quiso escapar de la habitación desnudo. Por eso, llamaron a la Policía que se acercó hasta allí y le tomaron testimonio al psiquiatra del músico, a quien volvieron a medicar.
“No quiero tener que estar en el velorio de mi hijo”, recordó entre lágrimas sobre la charla que tuvo con los efectivos policiales que en su momento se negaron a ingresar al domicilio de Chano Charpentier porque afirmaban que necesitaban una orden judicial.