Según señalan, sus fluidos podrían ocasionar múltiples embarazos.

Si un astronauta decidiera masturbarse, e incumplir con las instrucciones de la NASA, una astronauta podría resultar embarazada por los “fluidos perdidos”, pues los técnicos de la agencia especial han argumentado que sólo pocas gotas de semen podría generar un proceso de reproducción sexual, sin que se llevara a cabo el acto necesariamente.

¿Esto es real? ¿De dónde salió esta información? Durante una de las transmisiones del podcast de Conan O’Brien, titulada “Space Porn”.

NASA: por qué está prohibido masturbarse en el espacio

En “Conan O’Brien necesita un amigo”, el anfitrión tuvo como invitado un exagente de la NASA que habló de algunos aspectos que no comparte públicamente, como lo que hace cuando se produce un hallazgo o se realiza una caminata espacial con éxito. Todo en la frontera de la realidad, la ironía y el humor, hasta que O’Brien preguntó si el programa civil estadounidense estaba equipado con material pornográfico. El técnico contestó con un categórico “no”.

“No, nada de eso; tres mujeres astronautas pueden quedar embarazadas por el mismo hombre” que se masturba en un momento”. Hay otros técnicos de la NASA que han abordado el tema, como el doctor John Millism, el cual reveló a The New York Post que masturbarse en el espacio no puede traer más que catástrofe y un reflejo de una muy mala coordinación logística.

El doctor explicó que si se llevara a cabo una relación sexual en el espacio, sería como “intentar el acto mientras se “hace paracaidismo y el acto (así como el embarazo) no sería imposible”. Pero también hay quienes piensan que sí sería benéfico, pues evitaría que los hombres astronautas acumulen bacterias en la próstata. En las primeras misiones al espacio y la luna, la NASA se conformó con enviar al personal con pañales o prendas de absorción.

NASA: por qué está prohibido masturbarse en el espacio

Este método era efectivo para misiones de tan solo unas horas. Poco a poco, el sistema evolucionó a pasos acrecentados. Para la orina, algunos astronautas llevaban unos receptores de látex parecidos a un preservativo. Estos estaban unidos a una válvula y un tubo que recolectaba el líquido. Cuando las mujeres empezaron a viajar al espacio, el proceso tuvo que ser cambiado. En esa línea, la NASA creó un tipo de vestuario llamado “Pantalón de Contención de Absorción Desechable”.

Este pantalón iba debajo del traje especial. Como eso solo funcionaba para caminatas espaciales y viajes cortos, en la década de los 80 llegó el primer inodoro al espacio. Según los astronautas que lo usaron, no era muy cómodo y era difícil de usar. Se trataba de un agujero de dos centímetros y medio que usaba válvulas y bolsas para recoger los excrementos y deposiciones.