Los precios de las prendas suben más que la inflación y cada vez se hace más difícil renovar el vestidor, o simplemente abrigarse.

Si esta temporada de invierno tiene la necesidad de comprarse un abrigo o renovar el vestidor, hay que pensarlo dos veces. La ropa en Argentina está realmente incomprable para los bolsillos medios: una camisa de hombre vale unos 10 mil pesos, un suéter 14 mil y un pantalón de corderoy el mismo precio. Si se suman esas tres prendas el gasto total llega a 38 mil pesos, y eso sin contar el abrigo o los zapatos o zapatillas. Hoy en día, vestirse con ropa nueva puede llegar a salir más de 100 mil pesos. Una fortuna.

El programa GPS que conduce Rolando Graña hizo realizó un informe y verificó los precios siderales de algunos artículos. Una campera de abrigo, por ejemplo, puede llegar a costar 100 mil pesos e incluso más. Lo misma pasa con la ropa para los niños. Un jean en una tienda de primera marca cuesta 5 mil pesos, una campera de abrigo 11 mil y una remera entre 3 mil y 4 mil. La encargada de un local de la marca Portsaid reconoce que una campera que el año pasado costaba 14 mil pesos hoy se vende a 23 mil.

En los últimos dos meses, los precios aumentaron un 20 %, a razón de un 10% mensual. En un año, la suba estimada está en el orden del 70% , veinte puntos más por encima de la inflación. “Estamos mirando lo terrible de los precios que están en comparación del año que pasado. Antes podías comprarte dos camperas y ahora tenés que elegir una”, reconoce una mujer que salió de compras por la avenida Santa Fe.

Cristina Pezzente, una joven empresaria textil, entiende que el primer factor que encarece los precios tiene que ver con los costos de la materia prima, que proviene del exterior y esto se traduce a valor dólar. “Cuando uno quiere producir, lo primero con lo que se encuentra es con una materia prima totalmente importada y dolarizada. Y mano de obra casi no hay. Si hoy uno quiere hacer cien vestidos, por ejemplo, te dicen que recién lo pueden hacer para el año que viene.”

Por qué la ropa está incomprable e inaccesible para este invierno

“Entonces el costo de fabricación es mega alto», explica Pezzente. Para Enrique “Quique” Antequera, el otro “Rey de La Salada”, el aumento de los precios de la ropa “es por especulación”. “Muchos comerciantes quieren salvar el alquiler vendiendo una sola prenda. En La Salada es mucha producción y en la cantidad de venta se ve la ganancia”, reconoció en los estudios de América 24. Antequera llevó al piso varias prendas que se comercializan en el predio de La Matanza con precios que son muchísimo más bajos.

Un jean, por ejemplo, ronda los 2 mil pesos y una campera de abrigo entre 4.600 y 7.000. “En La Salada con 10 mil pesos te vestís. Es una locura lo que se está viendo en otras lugares”, aseguró. Por su parte, Ricardo Inti Alpert, coordinador en consultora tecno política, y otro de los invitados al programa GPS, entendió que la suba de precios está relacionada con la política del Gobierno. “Este país no produce nada y el Gobierno está errando su diagnóstico.”

Por qué la ropa está incomprable e inaccesible para este invierno

“Acá tenemos funcionarios que están en contra del trabajo y el problema es que los pobres, la gran clase de trabajadora, no están produciendo. El Estado es enemigo de lo productivo y amigo de la intermediación”, señaló para finalizar.