Las autoridades dejaron sin efecto una resolución de 1998 que prohibía portar balas en la recámara del arma.

Apuntando a las “actuales situaciones de inseguridad reinante y de violencia inusitada” en todo el territorio de Santa Fe, el jefe de la policía provincial dispuso dejar sin efecto una resolución de 1998 y autorizar “la posibilidad de poseer cartucho en recámara” en las armas reglamentarias de los efectivos sin que por ello reciban una sanción administrativa.

La resolución, firmada por el comisario retirado y jefe de la policía, Víctor Sarnaglia, explica que busca con esa orden “resguardar la seguridad de toda la población” y de “todo el personal policial actuante”.

La medida de erradicar la sanción administrativa se conoce en medio de un fuerte rebrote de la violencia en Rosario, con un repunte en el número de homicidios. Pero tiene además otro fuerte componente detrás: la decisión del ministro de Seguridad, Marcelo Sain, de avanzar contra la corrupción dentro de la policía y de apuntar a una fuerte renovación