El horroroso episodio en Vicente López fue descubierto porque la directora del colegio donde estudiaba el menor llamó a la policía porque el alumno hacía tres días que no iba a estudiar.

La preocupación de la directora de un colegio por la ausencia durante tres días de un alumno de siete años abrió la puerta del horror: el chico y su madre fueron encontrados asesinados en su casa de Florida, en Vicente López.

El padre y esposo de las víctimas fue encontrado muerto en el baño y creen que suicidó después de cometer el doble homicidio. Así lo informaron al diario La Nación fuentes de la investigación.

La escena de los hechos era nefasta. Un cuadro difícil de olvidar. Los cuerpos de un investigador que estuvo en la casa de las víctimas y victimario.

El niño hacía tres días que no concurría a la Escuela Waldorf Cuarto Creciente, situada en Florida, Vicente López. Como desde el establecimiento educativo no se podían comunicar con los padres, la directora, María Sol Quintas, se presentó en la casa del alumno junto con personal de la policía bonaerense. Como no contestaban a la puerta, se decidió abrirla con la colaboración de un cerrajero.

El niño y su madre estaban muertos. Habían sufrido golpes en diferentes partes del cuerpo. El padre y esposo de las víctimas fue encontrado fallecido en la bañera con signos de envenenamiento”, explicaron fuentes policiales.

La investigación quedó a cargo del fiscal Gastón Larramendi y se investiga, por el momento, como un doble homicidio seguido de suicidio.

Las personas fallecidas fueron identificadas por fuentes de la investigación como María Daniela Carco y Gabriel Cáceres, ambos de 45 años, y Leonel Cáceres, de siete.