Sin temor al posible contagio de coronavirus China confirmó que abrirá las puertas del Salón del Automóvil de Pekin en septiembre. Sería la única exposición en hacerlo en este 2020.
Desde que el Covid-19 comenzó a tener un fuerte impacto en las distintas partes del mundo, los diversos eventos de autos fueron cancelándose o posponiéndose uno a uno. Son muy pocos los que tienen esperanzas de desarrollarse este año. Sin embargo, la noticia llegó desde China, quienes afirmaron que el Salón del Automóvil de Pekín abrirá sus puertas en septiembre de 2020 a pesar de la incertidumbre que existe alrededor de la pandemia que todavía no tiene una solución clara.
La cita será precisamente el 27 de septiembre. La apertura para la prensa será un día antes en el ‘China International Exhibition Center New Venue’ (en Tianzhu), y el público general podrá acudir del 1 al 5 de octubre. Teniendo en cuenta las cancelaciones o celebraciones virtuales de los Salones de Ginebra, de Detroit y París, este sería el único en desarrollarse en el 2020.
Según el comité organizador, el salón de este año contará con la presencia de casi todas las marcas de automóviles nacionales y extranjeras conocidas con sus últimos productos y más de 30 marcas de automóviles internacionales como Volkswagen, Ford, Lincoln, General Motors, Toyota o Nissan. El Salón de Pekín se realiza bienalmente. En el 2018 reunió a 820 mil visitantes de 14 países distintos. Allí se expusieron más de 1000 vehícuos, incluidos 105 estrenos.
Para tranquilidad de todos, los organizadores tratan de enviar un mensaje asegurando que tomarán medidas de protección en los más 200 mil metros cuadrados donde se llevará a cabo este Salón. Aunque no aclararon se limitarán el aforo. El Salón del Automóvil de Pekín es un evento de vital importancia para un país vio, como tantos otros, cómo su economía y su industria automotriz se resentían, arrastrando una caída histórica de ventas.
En enero de este año el mercado chino de automóviles se contrajo por primera vez desde 1992 y las ventas cayeron un 6 %, hasta los 22,7 millones de unidades con el mismo telón de fondo que hoy. El país asiático necesita un impulso como el que supone este salón, pero es bastante improbable que los visitantes extranjeros puedan entrar al país.
Desde junio, y después de registrarse un rebrote que fue rápidamente controlado (según sus datos), la vida volvió al epicentro de la pandemia. Abrieron los cines, librerías y museos de todo el país, y en Wuhan incluso se atrevieron a celebrar un multitudinario festival acuático, con decenas de miles de personas juntas, sin mascarillas ni distanciamiento social.
Desde el gigante asiático aseguran que ya tiene la vacuna y, a juzgar por lo visto en las últimas semanas, de a poco van recobrando sus vidas normales. Pareciera que el coronavirus dejó de ser una amenaza para China y la clara confirmación al respecto viene de la mano de esta noticia.